Las brigadas de policía Científica y Judicial continuaban ayer su labor para identificar a los autores del asesinato de un hombre de 78 años en su piso de Colón. Según el entorno de la víctima, no se tiene noticias de que hayan sido identificados el hombre y la mujer que se cree que pudieron cometer el crimen. Una vecina, Lucía, manifestó que la policía mostró a un vecino "la foto de un hombre para saber si lo reconocía, pero nada más".

Varios agentes volvieron al piso de la víctima en busca de pruebas para encauzar sus pesquisas, y rastrearon los jardines de delante de la fachada del edificio y los setos, también del resto de la avenida, en busca del arma homicida.

La policía también había revisado la cámara de vigilancia de una empresa que se encuentra al lado del portal, pero "había dejado de grabar con anterioridad y no había nada", afirmó José María Rangel, aparejador, quien ese día salió "a las tres menos diez, más o menos la hora del crimen, pero no vi nada extraño".

Basilio de la Hoz, regente de Frutería Niña, contó que el anciano había estado comprando en su tienda "el día antes del crimen, traía un ojo morado, le pregunté qué le pasaba y dijo que era del azúcar; el hombre se llevó un kilo de cerezas".