La Orquesta de Extremadura ofrecía el pasado jueves en el Palacio de Congresos de Badajoz y el viernes en el Gran Teatro de Cáceres el duodécimo y último concierto de su temporada de abono. Comenzaba con el poema sinfónico Divina Comedia - Infierno del compositor madrileño Conrado del Campo. Obra de exuberante sonoridad, algo vanguardista y de brillante romanticismo. A continuación la Oex , bajo la sobria y eficaz batuta de Álvaro Albiach, abordó la singular obra La Canción de la Tierra del compositor checo de finales del siglo XIX Gustav Mahler, con seis secuencias y texto en alemán, que expresa una visión trágica de la vida y el amor, con fantástica instrumentación. Intervinieron la mezzo canaria Nancy Fabiola, de amplio registro y musicalidad, y el tenor inglés Mark Le Brocq , de poderosa y bien timbrada voz. Ambas obras eran interpretadas por la OEx por primera vez, evidenciando su elevado nivel interpretativo.
Por otra parte , los dos Conservatorios de música adscritos a la Diputación de Badajoz llevaban a cabo sus respectivos actos académicos de graduación y conciertos de clausura de curso. El Bonifacio Gil, de grado superior, lo celebraba el viernes en el salón de plenos de la diputación con la imposición de becas a 24 alumnos de 11 especialidades, seguida de un recital de solistas y dúos, finalizando con el Ensemble de Saxofones. El Juan Vázquez, de grado medio y profesional, tenía lugar el lunes en el teatro López de Ayala , dedicado a la profesora Pilar Cerezo con motivo de su jubilación. Participaron diferentes solistas, grupos de cámara, conjuntos instrumentales , concluyendo con la Orquesta y con la Banda del Conservatorio.
Tambien se celebran durante estas fechas los conciertos de clausura de curso de los Conservatorios Hermanos Berzosa de Cáceres, García Matos de Plasencia y Esteban Sánchez de Mérida, así como los de Almendralejo, Don Benito y Montijo, además de las diferentes Escuelas Municipales de Música.
