Nadie podía creerse que hubiese concejales del equipo de gobierno municipal en Badajoz que siguiesen haciéndose cargo de áreas importantes que les exigen tiempo y dedicación y no estuviesen liberados, por lo que percibirían a cambio de su entrega tan solo 410 euros mensuales. El acuerdo de investidura del PP con el apoyo de Ciudadanos obligó al alcalde a desprenderse de concejales liberados con el propósito de que esta medida supusiese un ahorro a las arcas públicas. A regañadientes, en el equipo de gobierno se quedaron sólo siete con dedicación exclusiva, por la que Fragoso percibe este año 4.717 euros mensuales y sus seis concejales liberados, 3.802.

En teoría, los demás, que se quedaron con responsabilidades pero sin un sueldo decente, tenían que verlas venir y trabajar por amor al arte. Pero seguían yendo al ayuntamiento, haciendo horario de mañana, tarde, noche y fines de semana. Con lo cual, resultaba incomprensible que pudieran compaginar su vida política con otra laboral privada. Tenían oficio, pero no beneficio. Seguían sonriendo y acudiendo a sus tareas propias del equipo de gobierno, lo que llevaba a suponer que, de algún modo, se solventaría su situación. Ya hallarían la forma.

Y se encontró. Tres de ellos encontraron hueco en el grupo popular de la diputación, lo que les reporta unas nada desdeñables dietas todos los meses. Mira por dónde, Ciudadanos también se empeñó en que eso de cobrar una asignación fija en el ayuntamiento por asistencia a las labores municipales --comisiones, juntas de gobierno y plenos, principalmente-- no era demasiado justo y había que establecer un sistema de remuneración en función de la asistencia. Es la forma legal que rige en otras corporaciones.

Pero desde que se adoptó el acuerdo al inicio de la legislatura, nunca más se supo. Pasaron los meses y ahora ya sabemos que ha habido negociaciones para establecer la forma de cobro de los concejales, que han dado lugar a que se reflejen las cuantías exactas en las bases de ejecución del presupuesto municipal del 2016 que se aprobó el viernes, con el voto en contra del PSOE y Podemos Recuperar Badajoz. Estos dos partidos niegan que las cantidades establecidas hayan sido consensuadas con ellos, afirman que han asistido como meros convidados de piedra y aseguran que les transmitían la información como hechos consumados. Los socialistas han calculado que sus concejales vendrán a salir por unos 600 euros mensuales (hasta ahora 330 fijos). Cuanto menos concejales tenga el grupo, más cobrarán, pues pertenecen a más comisiones. El sistema establece topes, para que el resultado no sea exagerado.

Las dietas acordadas están al nivel de ayuntamientos con población semejante. No hay que llevarse las manos a la cabeza. En otras ciudades incluso los portavoces de los grupos municipales de la oposición están liberados. Lo que llama la atención es que no se ha informado de este acuerdo, haya sido unánime o no. Sorprende que tenga traslación en los presupuestos municipales y ni la concejala de Hacienda, Maripaz Luján, lo mencionase cuando los presentó a la prensa, ni los grupos de la oposición hayan rendido cuentas de una regulación que les afecta. Tanto ocultismo levanta sospechas. Al hacer balance del año habrá que comprobar si los números salen de verdad. Pues puede ocurrir que lo que van a cobrar ahora los concejales en función de su asistencia, cueste más a los ciudadanos que cuando había más liberados. Tiempo al tiempo.