He leído en internet que me iban a denunciar el banco y la inmobiliaria; si lo hacen, vuelvo a saltar y me meto otras vez; no salgo de la casa hasta que lo ordene un juez». Así se manifestó ayer Jony Calvo, cabeza de familia que ocupó «una» --y «no dos, como han dicho»-- vivienda adosada de la calle Batalla de San Sebastián de Cerro Gordo, y que fue desalojada por la presión vecinal la noche del pasado lunes.

La familia entró en el 12 de la calle «sin problema; salté el muro y abrí la puerta porque no tenía cerrojo, bastó media vuelta de llave y abrí para que entraran mi mujer y mis cuatro hijos», según contó a preguntas de este diario.

Jony Calvo es el padre de una familia formada por el matrimonio y cuatro hijos, que fue desahuiciada de una vivienda social en Mérida, «por ocupación ilegal, nos dijeron, pero nosotros entramos cuando estaba la tía de mi mujer y solo teníamos un hijo; luego ella se fue y nos dijo que nos ocupáramos del piso; no nos metimos de malos modos, ni hemos tenido una vivienda social propia», afirmó.

Según contó, la familia está en Badajoz, dividida, en dos casas de su familia. «Nosotros somos de Badajoz, pero hemos vivido en Mérida, en la casa de la tía de mujer hasta que nos desahuciaron hace un mes y medio y desde entonces hemos estado en casas de familiares, pero la crisis afecta a todos y no podíamos seguir. Llevo mes y medio sin tener donde meterme con mis hijos, por eso saltamos y entramos en esa casa».

DERECHOS / Además, dijo, «la Constitución dice que todos tenemos derecho a un techo; y nosotros no nos metimos con la gente, ¿por qué vienen ellos a meterse con nosotros?». Jony Calvo admite que él amenazó a los residentes que se congregaron ante la casa, como explicaron algunos de ellos, quejándose por la actitud amenazadora al irse sin pagar de los bares y enfrentarse a ellos. «Sí, lo hice porque nos sentimos agredidos; y porque estaba mi hijo, si no, salgo», indicó.

Calvo explicó que su situación en Mérida «no era ilegal, estábamos empadronados con nuestros hijos». Ahora la familia vive repartida, «yo estoy con dos hijos en casa de su madre y mi mujer con otros dos en casa de un hermano». Además, afirmó que no tiene solicitada una vivienda y reclama una solución para dar un techo a su familia. «Pedí hablar con la mujer de Fomento y hace más de un mes que no sé nada».

Jony Calvo no tiene trabajo, «estoy parado y cobro el paro desde que salí de prisión ahora hará un año». Durante el tiempo que permaneció en el centro penitenciario, afirma que «me saqué el carnet de conducir, hice el Graduado Escolar y un curso de informática». Su situación, dijo, es que «si no nos dan una solución, tendré que meterme donde sea con los hijos».