La policía local realizó durante la campaña navideña 107 pruebas de alcoholemia a conductores que circulaban por la ciudad, de las que 11 resultaron positivas. Seis de los conductores que dieron positivo fueron llevados ante el juez por un delito contra la seguridad del tráfico, al superar el nivel máximo permitido de 0,6 miligramos de alcohol por litro de aire expirado, mientras que los otros cinco fueron sancionados por la vía administrativa, con la consiguiente retirada de puntos del carnet de conducir, ya que consumieron pero no alcanzaron el máximo.

El inspector segundo jefe de la Policía Local de Badajoz, Antonio Nogales, explicó que también se registraron 11 "negativos límites", lo que significa que en el momento de hacer la prueba esos conductores "llegaban o superaban la tasa, pero a los 15 minutos se volvió a repetir y dieron negativo". En este caso, los agentes, como medida preventiva, "piden al conductor que no siga conduciendo", señaló.

Los agentes hicieron desde el 21 de diciembre 9 controles "estáticos", en puntos concretos, el resto fueron "dinámicos", realizados de manera aleatoria con un etilómetro portátil digital.

Las principales vías de entrada a la ciudad, la plaza de la Libertad y la de Caldas da Rainha, fueron los lugares utilizados por los agentes para los controles, según Nogales, quien reconoció que "ha sido bajo el número de positivos", por lo que cree que el objetivo de esta campaña "se ha cumplido, porque se pretendía que el conductor se lo pensara, y mucho, antes de conducir si iba a beber y vemos que la gente se está concienciando; nunca ha habido en Badajoz tanta demandad de taxis", señaló.

Respecto a las pruebas realizadas el 22 de diciembre en Badajoz por la Fiscalía de Seguridad Vial, en colaboración con Tráfico y la Guardia Civil, para controlar el consumo de drogas, el 5,2% de los conductores sometidos a controles mediante un test de saliva dio positivo, frente al 3,8% de media nacional, según comunicó Europa Press.