Un nuevo accidente de tráfico, protagonizado por un ciclomotor conducido por adolescentes, ha vuelto a conmocionar a los vecinos de la barriada de Suerte de Saavedra, donde hace justo dos semanas un joven de 17 años que conducía una moto perdía la vida arrollado por un coche en la misma barriada. El joven se había saltado un ceda el paso. El último accidente ocurría ayer justo a las 17.10 de la tarde y aunque no ha tenido consecuencias tan trágicas, los testigos aseguran que el resultado pudo ser peor. Esta vez también el ciclomotor se saltó un ceda el paso, según fuentes de la policía local.

Dos jóvenes que circulaban en un ciclomotor por la calle Vidal Lucas Cuadrado se empotraron literalmente contra un coche que venía por la calle perpendicular, justo en la esquina con Arcadio Guerra. A esas horas apenas había gente en la calle, pero los vecinos escucharon el fuerte impacto. Los jóvenes cayeron sobre el capó, que quedó hundido, y uno de ellos rompió con la cabeza la luna del coche, según contaba visiblemente nervioso el conductor del automóvil, quien aseguró que circulaba despacio, a no más de 40 kilómetros por hora. Según las primeras informaciones, ninguno de los adolescentes llevaba casco. Las mismas fuentes señalaron que el coche intentó esquivar al ciclomotor, pero no pudo evitarlo. En el suelo quedaban señales del frenazo.

PRONOSTICO LEVE Como resultado de la colisión los dos adolescentes sufrieron heridas y contusiones, aunque ninguna de ellas de gravedad, a pesar de lo aparatoso del impacto, pues presentaban cortes en la cara y el cuero cabelludo. El conductor es J. M. M. B., de 18 años, y fue dado de alta al momento en el hospital Infanta Cristina, donde también fue trasladado el acompañante, L. F. P., de 16 años, que presentaba múltiples contusiones; su pronóstico era leve salvo complicaciones, pues estaba siendo sometido a distintas pruebas, según la información facilitada por el Servicio Extremeño de Salud. Los dos chicos son de la barriada.

Los vecinos de los bloques del entorno estaban consternados. Una de las mujeres que oyó el impacto es tía del joven de 17 años que perdió la vida en el accidente ocurrido la noche del lunes 9 de agosto. "Aquí, como no pongan remedio, nos vamos a matar más de dos", se lamentaba. "Como no pongan algo", recalcaba y, con otras vecinas, reclamaba mayor vigilancia en la zona. Sobre el hecho de que hubiera a esas horas jóvenes circulando con moto, comentaban que "están aquí a estas horas y a todas horas". De hecho, contaban que la madrugada anterior una moto de gran cilindrada había estado molestando circulando por las calles de la barriada a toda velocidad.