El parque arqueológico y natural de El Rebellao estará en solo unos meses abierto al público. La intención de la Fundación Dolores Bas de Arús, propietaria de esta finca de más de 800 hectáreas, ubicada en el término municipal de Badajoz y muy próxima a Valverde de Leganés y Almendral, es que los ciudadanos puedan visitar «su rico y diverso patrimonio cultural» a finales de la próxima primavera.

Fue en el año 2013 cuando la fundación se marcó como reto la puesta en valor de El Rebellao, donde se conservan una veintena de asentamientos arqueológicos que datan de distintas épocas: neolítico, calcolítico, edad de bronce, periodo orientalizante, villas romanas, emplazamientos tardoantiguos y altomedievales (visigodos, emirales, califales) hasta llegar a una aldea medieval, que fue arrasada en el siglo XIV durante las guerras con Portugal y de la que a día de hoy se mantiene la iglesia de San Idelfonso. Con el objetivo de investigar, conservar y difundir este «excepcional» patrimonio, hace cinco años se iniciaron las primeras prospecciones arqueológicas, que permitieron que se documentasen hasta 15 yacimientos.

Tras la reciente ampliación de la propiedad, que ha incorporado un espacio denominado Los Aguilares, se han realizado nuevas excavaciones, que han permitido descubrir otros seis yacimientos, que este mismo año han sido incorporados al catálogo ya existente. Entre los años 2015 y 2017 se han llevado a cabo cinco cursos de arqueología sobre cuatro yacimientos de la finca: Aldea El Rebellao, Arias I, Arias II y Dolmen Rebellao I, «una de las joyas del patrimonio cultural extremeño», según destaca la fundación.

Estas campañas fueron «pioneras» por su carácter didáctico, lúdico y formativo y han resultado «un éxito», pues los objetivos científicos, educativos y culturales que se establecieron han sido superados «ampliamente». Así, no solo se ha avanzado en el conocimiento arqueológico e histórico de la zona, sino que también se ha creado un grupo de personas sensibilizadas con la arqueología y la conservación del patrimonio. En estos cursos han participado alumnos de la Universidad de Mayores de Extremadura y del instituto Campo de Valverde de Leganés y de ellos ha surgido la Asociación de Amigos del Parque Natural y Arqueológico del Rebellao, un colectivo sin ánimo de lucro cuyo objetivo es apoyar, difundir y participar en todas las actividades que la Fundación Dolores Bas lleve a cabo en este espacio.

CAMPAÑAS / La primera campaña, que se realizó sobre la iglesia de San Ildefonso y su entorno más próximo, permitió conocer el edificio religioso medieval y el cementerio, pudiéndose documentar varios enterramientos del siglo XIII. Además, se comprobó la existencia de una ocupación andalusí previa a la establecida en tiempos de la repoblación cristiana de alfoz de Badajoz.

Las dos siguientes campañas de prospecciones se centraron en el yacimiento Arias I. En este emplazamiento se pudo certificar una larga ocupación que comenzó en el neolítico y se extendió hasta el bajo imperio romano. Entre los hallazgos más relevantes, destacan las cabañas neolíticas-calcolíticas y la abundante cultura material relacionada con ellas. Su descubrimiento ha permitido que se inicie la construcción de un neopoblado de características «idénticas» al exhumado en una zona cercana, que posibilitará que los visitantes del parque puedan comprender todo lo excavado en este lugar. En este mismo yacimiento, también ha sido documentada una ocupación del periodo orientalizante, una época que, según los expertos, en la región se vincula con yacimientos como Cancho Roano, en Zalamea de la Serena, o el de La Mata, en la localidad de Campanario.

Las últimas dos campañas efectuadas hasta ahora se llevaron a cabo en el yacimiento denominado Arias II, que se localiza en mitad de los cultivos de cereales. En esta zona, las excavaciones arqueológicas posibilitaron constatar la existencia de un asentamiento romano de carácter agrícola al que se superponen otras fases más recientes, una del periodo visigodo y otra del islámico. Ello ha permitido ampliar el conocimiento arqueológico de El Rebellao, con etapas históricas que no habían sido documentadas hasta ese momento.

Este mes de marzo, según explicó Pedro Arias, presidente de la Fundación Dolores Bas, se retoman las excavaciones con el sexto curso de arqueología, que se prolongará hasta el próximo mayo. En esta ocasión, en las prospecciones van a participar alumnos de la Pershing Middle School de Houston, que dedicarán varios días del viaje de estudios que están haciendo por España y Portugal para exacavar en El Rebellao, junto a estudiantes del instituto de Valverde de Leganés. Es la primera vez que un instituto extranjero se suma al proyecto.

La llegada de los alumnos norteamericanos está prevista para hoy y mañana y pasado se desplazarán a la finca para realizar los trabajos de excavación. Posteriormente, serán de nuevo los miembros de la Asociación de Amigos del Parque Arqueológico y Natural de El Rebellao, los alumnos de la Universidad de Mayores de Extremadura y los estudiantes del instituto valverdeño los que se encargarán de continuar con las prospecciones.

INTERÉS DE OTROS CENTROS / Según señaló Pedro Arias, son numerosos los centros educativos tanto nacionales como internacionales que ya han mostrado su interés por participar en estas campañas y se espera que en el futuro pasen por El Rebellao alumnos de Francia, Italia, Portugal y Estados Unidos, además de procedentes de distintos puntos de España.

Todos estos trabajos se están llevando a cabo con fondos propios de la fundación, pues no se cuenta con subvención de ninguna administración pública. La idea es que a través de sus bienes y recursos, El Rebellao contribuya al conocimiento, la integración social y el desarrollo de Badajoz, Valverde de Leganés y el resto de poblaciones cercanas. Con este fin, según detalla la Fundación Dolores Bas, se irán creando nuevas vías de participación y colaboración ciudadana en este proyecto.