Con el objetivo de apoyar, acompañar y prestar ayuda a personas que atraviesan situaciones de dificultad por diferentes problemas emocionales, la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, en Valdepasillas, ha abierto un servicio de escucha, del que se encargan 12 voluntarios que han recibido formación en relación de ayuda durante un año.

Es el primer servicio de este tipo que existe en Badajoz y su funcionamiento es bastante similar al del Teléfono de la Esperanza, con la diferencia de que en su caso la escucha se realiza de forma presencial. Las personas que quieran recurrir a este servicio solo tienen que llamar por teléfono al 673 311 798, donde un voluntario recogerá de manera somera su problema y concertará una cita. El centro de escucha se ubica en los locales comerciales que ocupó la parroquia en sus inicios, en José María Alcaraz y Alenda, donde se han habilitado tres salas.

José María Pérez, coordinador de este servicio, aclaró que no se trata de sustituir "ni a la medicina ni al psicólogo", sino de ofrecer un servicio complementario que dé opción a las personas que están sufriendo a que expresen sus preocupaciones de manera libre. "Lo que se pretende que es que ella misma se dé cuenta del origen de su problema y pueda solucionarlo", explico. De hecho, en el caso de detectar que el usuario necesita ayuda de profesionales médicos, se le recomendará. El máximo de sesiones que se ha establecido es de entre 15 y 20 por persona.

Los voluntarios reciben a personas que están viviendo momentos difíciles por la pérdida de un ser querido, que sufren crisis emocionales o de autoestima o a aquellas que son cuidadores de enfermos crónicos y necesitan descargar sus preocupaciones. En definitiva, a todo aquel que necesite ser escuchado y que por un motivo u otro no quiera o pueda hablar de sus problemas con su familia o amigos. Por la experiencia de otros proyectos similares, más de la mitad de usuarios de este tipo de servicio (un 65%) son mujeres con una edad media de entre 40 y 60 años.

El centro de escucha, aunque de inspiración cristiana, está abierto a cualquier persona independientemente de sus creencias religiosas o ideológicas. "Nosotros acogemos a la persona, se la acepta incondicionalmente y no se la enjuicia", apuntó el coordinador

Pérez explicó que, aunque este servicio se pone en marcha ahora en esta parroquia pacense, los religiosos Camilos abrieron hace 20 años el primero en Tres Cantos (Madrid). Su modelo es el que se ha seguido en Badajoz, cuyos voluntarios han sido formados por el propio director del centro de Nuestra Señora de Guadalupe, Enrique Delgado, piscólogo con experiencia en este campo. Además, los voluntarios continuan ampliando conocimientos en reuniones mensuales en las que analizan las diferentes sesiones.

El centro de escucha está dando sus primeros pasos y sus responsables confían en que con la difusión sea de utilidad cada vez a más personas, aunque son conscientes de que puede no resultar fácil decidir recurrir a este servicio. La intención es que en el futuro, además de las sesiones individuales, se puedan organizar grupos de autoayuda.