Se estima que existen entre 20.000 y 30.000 especies de pescados, sin embargo ninguno de ellos se parece al que elaboraron los alumnos del colegio Los Glacis de Badajoz. Este pez tiene la cabeza y la cola hechas de atún en conserva, su cuerpo formado por rodajas de zanahorias y lechuga, su hábitat es un plato, su cama un lecho de mejillones con tomates cherry y puntitas de espárrago y sus compañeras de viaje son tres sardinitas de lata.

El destino final de la existencia de este pez de colores: el estómago de los 90 escolares de Los Glacis, que degustaron este plato realizado en el taller organizado por el FROM, organismo autónomo del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, que está llevando esta actividad a 25 colegios de la capital pacense desde el 27 de enero hasta el 10 de marzo.

Los talleres en comedores escolares es una de las actividades colectivas programadas por este organismo que llegará a 50.000 niños de 8 a 12 años de varias ciudades españolas. Con ella pretende introducir el pescado en la dieta de los más pequeños.

Los escolares cocinaron con sus propias manos esta sugerente ensalada en forma de pez, bajo las indicaciones de José Antonio Torres y Rubén Cintas, monitores del taller.

"Les damos un modelo de cómo se hace esta ensalada y la receta y luego ellos lo preparan y se lo comen", explica José Antonio Torres, quien asegura que la "clave" de este taller es que "el plato resulta atractivo no sólo por su aspecto sino porque lo han hecho ellos mismos y eso hace que se involucren".

Lo importante, según señala, es que desde edades muy tempranas se acostumbren a ver en sus casas que sus padres consumen pescado, "sus hábitos depende de la educación que reciben en la familia".

A Soledad Rubio, alumna de Los Glacis, lo que más le ha llamado la atención de este taller ha sido conocer que hay distintos métodos de pesca, y que en algunos casos se utilizan radares y sondas. "Ha sido muy divertido", explica. Para Martín Zamora lo más interesante fue "que nos han enseñado a cocinar, porque yo cocino poco, y hemos podido probar una cosa nueva".

A algunos alumnos les gusta el pescado, y nombran a las sardinas, la merluza o el atún, entre sus preferidos, sin embargo no son muchos los que, como a Carla Regalado les gusta "el pescado igual que la carne", algo menos común entre los más pequeños.

Sin embargo, hay otros que lo rechazan de pleno, como es el caso de José Luis Mayoral que insiste en que no le gusta "porque sabe a pescado" y confiesa, aunque no muy convencido, que después del taller del FROM va a darle otra oportunidad a los peces, "lo intentaré", señala arrugando la nariz.