Vivo en mi barrio no es el único programa que Proyecto Vida dedica a la prevención. Desde el 2004, cerca de 4.000 alumnos de centros educativos de Badajoz y poblaciones del entorno han participado en la iniciativa Puertas Abiertas , a través de la que los estudiantes conocen el centro de tratamiento que la oenegé tiene en Badajoz y se ponen en la piel de adictos, familiares y terapeutas en una actividad que se denomina role play .

El objetivo es que desmitifiquen lo que es un centro donde se tratan las adicciones y que la experiencia valga a los que han tenido sus primeros escarceos con la droga para que lo dejen y para reforzar la actitud de los que no la han probado.

La actividad está dirigida a jóvenes de entre 15 y 16 años y las visitas se realizan todos los miércoles en grupos de no más de 35 miembros. Desde Proyecto Vida ven esta fórmula más "efectiva" que las visitas de sus profesionales a los colegios.

"Cuando vienen no solo se llevan la información, sino que ellos mismos sirven de mediadores en la calle: con la familia, los amigos...De hecho, muchos padres y niños con problemas han llegado al centro porque les han hablado de la visita", destaca Begoña Hermosell, directora de Proyecto Vida.

Este programa no cuenta con subvención oficial y lo costea íntegramente Cáritas Diocesana.