No recordaba ayer el concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, si algún proyecto industrial y agropecuario no ha salido finalmente adelante por la «excesiva protección» que fija el Plan General Municipal (PGM) en los terrenos rústicos, pero sí la cantidad de trámites que se requieren para desarrollarlos. El Ayuntamiento de Badajoz ha iniciado la modificación estructural del PGM para flexibilizar la implantación de usos industriales, agropecuarios y de equipamientos en el suelo no urbanizable en todo el término municipal, así como para adaptarlo a nuevas normativas y actuaciones desarrolladas, según explicó el concejal del área, Celestino Rodolfo. El concejal recordó que ya se sacó adelante una modificación en el mismo sentido pero que se limitaba al entorno del casco urbano y de los poblados. «Ahora esta modificación es más ambiciosa».

Al tratarse de una modificación estructural del planeamiento, para la que el ayuntamiento ha contratado incluso servicios asistencias técnicas, deberá recibir el visto bueno de la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Extremadura (Cuotex), tras la aprobación inicial, que irá a pleno el lunes, el periodo de exposición pública y la aprobación provisional.

Rodolfo explicó que el objetivo es «reajustar» determinadas condiciones en el suelo rústico de todo para posibilitar una mayor flexibilidad en la implantación de determinados usos y actividades, porque a lo largo de la vigencia del plan, desde la última revisión en el 2007, «se ha comprobado que el suelo no urbanizable del término municipal de Badajoz adolecía de una excesiva protección» y eso hacía «imposible o muy difícil» implantar algunas actividades de tipo industrial, agropecuario y de equipamientos. También se ha constatado que la edificabilidad era insuficiente y se va a incrementar en explotaciones nuevas o ampliación de industrias que ya existen. Según el concejal, la regulación del PGM era más «rigurosa» que la propia normativa medioambiental de la Junta de Extremadura. Rodolfo reconoció que la tramitación es «compleja» y requiere todos los informes favorables desde el punto de vista medioambiental «porque no se trata de permitir cualquier cosa en cualquier sitio ni que se vaya a abrir la mano».

Además, se aprovechará la modificación para adaptar el suelo no urbanizable a la nueva normativa vigente, como la referida a las energías renovables, que no estaba contemplada cuando se aprobó la revisión del PGM, además de una nueva regulación en materia de extracción de áridos, pues ahora solo se permite en el dominio público hidráulico. También se van a ajustar los planos a las nuevas actuaciones para adaptarlos a la realidad física. Rodolfo puso el ejemplo de la Plataforma Logística. Por último, se revisarán los límites de las Zonas de Especial Conservación (ZEC). Rodolfo no citó que también se va flexibilizar el plan para permitir una planta de tratamientos de escombros, de la que informó Luis García-Borruel, portavoz de Ciudadanos. Además, Borruel pidió un informe sobre la recepción de las obras en el nuevo cruce de la BA-20 y del carril-bici de la avenida Sinforiano Madroñero, que se le facilitará en unos días.

Por otro lado, la Comisión de Urbanismo aprobó el estudio de detalle de ordenación de volúmenes presentado por Urbasa de una parcela de 1.590 metros cuadrados situada junto al centro comercial de Las Vaguadas,