Una vez finalizada la parada biológica, la obra que la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) realiza en el río recuperará el ritmo, que primero se vio frenado por las intensas lluvias del pasado invierno, que se prolongaron hasta el final de la primavera, y después por la parada biológica.

Las obras han seguido su curso tras concluir la tala y desbroce de árboles, en su mayoría eucaliptos, en el tramo urbano comprendido entre el azud de la Pesquera y el azud de La Granadilla, donde se está recuperando una cota a la que no podrá llegar el agua cuando el río crezca. En estos momentos se está preparando este terreno para luego cubrirlo con tierra vegetal y realizar las plantaciones.

La idea, según explicó ayer el presidente de la CHG, Eduardo Alvarado, en la visita que realizó a la obra del río junto con la subdelegada del Gobierno, Yolanda García, y el alcalde en funciones, Francisco Javier Fragoso, es adelantar las plantaciones de árboles al otoño "para ganar un año", esto permitirá agilizar la obra, que no estará terminada hasta el 2012.

Se plantarán especies ribereñas en las orillas y se sustituirán otras por especies autóctonas.

En la margen izquierda, entre el puente Real y el de la Universidad, se ha eliminado la masa forestal y se han iniciado las fases previas para hacer caminos y senderos.

En la zona del Pico y La Pesquera se está trabajando para mantener la lámina constante de agua entre los dos azudes y también se realizan tareas para abrir el brazo de Jamaco, --un brazo natural del río cegado por la tierra--, con el fin de que el Pico se convierta en una isla, a la que se podrá acceder por una pasarela.

MAS OBREROS En la parte más alta del Pico se ha eliminado vegetación "y se está actuando en la zona de las graveras para dejarlas como zonas de lagunas que se puedan visitar", según Alvarado.

Los trabajos se intensificarán a partir de septiembre para adelantar lo máximo posible antes de que llegue la temporada de lluvias, aunque reconoció que "la fase de ahora va a ser menos dificultosa que la del año pasado, entonces había que hacer la explanación y las máquinas no podían entrar".

Esto hará que se incremente el número de trabajadores en la obra, en la que en estos momentos hay 50 operarios.

La subdelegada destacó el interés y la implicación de todas las administraciones (Junta de Extremadura, Ministerio de Medio Ambiente y ayuntamiento) por recuperar el río con este proyecto financiado con fondos Feder, en el que se invertirán 44 millones de euros.

Además de la creación de un parque de ocio con zonas deportivas, se restaurará el antiguo molino que fue la fábrica de la luz, que podría convertirse en un centro de interpretación, aunque su uso lo decidirá finalmente la comisión de seguimiento una vez se recupere, al igual que el Revellín de la cabecera del puente de Palmas.

También se verá en la comisión, que se reunirá en septiembre, qué solución se dará a los propietarios con problemas para acceder a sus cocheras o patios, cuyas entradas han quedado dentro de lo que será la zona verde.

El alcalde en funciones aseguró que los técnicos decidirán si cabe o no urbanísticamente hacer un vial, aunque dejó claro que el ayuntamiento no lo tiene previsto porque "no hay que olvidar que ésta es una actuación de regeneración urbana, donde no hay que consolidar lo existente sino con el tiempo tirar lo que hay".

Fragoso recordó que "hay que actuar en función del interés general, no del particular" y apuntó que cabría "una actuación parecida a la que se hizo en el antiguo Cebadero, pero es complicado".