La policía local impondrá sanciones de hasta 301 euros a quienes arrojen y exploten petardos u otros artefactos pirotécnicos en la vía pública. Así lo anunció ayer el portavoz del gobierno municipal pacense, José Antonio Monago, quien concretó los aspectos recogidos en el bando del alcalde que prohíbe la venta de estos productos en locales no autorizados o su uso en la calle. La razón es el riesgo y las molestias que conllevan, incluso para la salud, "pues producen potentes explosiones que pueden afectar a cualquier persona que tenga cardiopatías u otra enfermedad", dijo el edil de Seguridad Ciudadana y de Policía Local.

Este cuerpo se seguridad velará por el cumplimiento del bando en los establecimientos, uno al parecer en la capital pacense, y ya ha puesto denuncias por el lanzamiento de cohetes en Las Vaguadas.