La Guardia Republicana Portuguesa entregó ayer al delincuente español que cumple condena en ese país Jaime Giménez Arbe, conocido como El Solitario , a la Policía Nacional y la Guardia Civil españolas en el centro penitenciario de la vecina localidad lusa de Elvas. De este modo se cumplió el exhorto del Juzgado de Instrucción número 3 de Tudela, por el que solicitó la presencia del citado recluso en España, donde se le juzgará como acusado de los asesinatos de los guardias civiles José Antonio Vidal y Juan Antonio Palomero, perpetrados el 9 de junio del año 2004 en la localidad navarra de Castejón. Se trata de una de las diversas causas que tiene abiertas en España.

La entrega del preso tuvo lugar poco antes de la una de la tarde en medio de un gran despliegue policial en las inmediaciones de la prisión elvense, a la que llegó en un furgón de la Guardia Republicana desde la prisión de Monsanto, en Lisboa.

El furgón policial con el preso llegó alrededor de las 12.30 a la cárcel de Elvas y poco después, tras la firma del acta de transferencia del recluso, éste fue introducido en un furgón de la Guardia Civil, que se encaminó por la autovía A-5 a Madrid, custodiado por varios vehículos del Cuerpo Nacional de Policía.

ESPOSADO El Solitario bajó del furgón portugués esposado y con las manos sobre la cara para evitar ser reconocido. Por su aspecto parecía estar más delgado, vestía un anorak verde y se tapaba la cabeza con una capucha. Del mismo modo salió para montar en el vehículo de la Guardia Civil.

Pocos minutos después llegaban a la comisaría conjunta hispanolusa de Caya dos vehículos de la policía portuguesa, en uno de los cuales viajaban tres reclusos que fueron entregados a los agentes españoles, ante los medios de comunicación de ambos países cuando ya se sabía que la entrega de El Solitario se había hecho unos kilómetros más adentro de Portugal, en Elvas.

NORMALIDAD, DISCRECION La delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, declaró más tarde en Mérida que "la entrega se ha hecho con total y absoluta normalidad". Y que se hizo en Elvas y no en Caya, donde se hacen todas, porque requería "una total discreción", dijo.

Para entonces El Solitario iba camino de Madrid, en una de cuyas cárceles de alta seguridad, la de Valdemoro, pasó la noche, para continuar hoy camino a la prisión de Zuera, en Zaragoza, donde estará hasta que acuda al tribunal navarro que investiga los asesinatos de los dos guardias civiles, que tiene dos meses para realizar sus actuaciones.

Jaime Giménez ha sido hasta su detención en julio del año pasado en Figuera da Foz, cuando se disponía a cometer su último atraco antes de retirarse, el delincuente más buscado por la policía española. Una vez cumplidos los trámites judiciales en España, el recluso debe volver a la prisión portuguesa, donde será juzgado por intento de atraco.

Jaime Giménez --que calificó la cárcel de Monsanto como "la Guantánamo portuguesa" porque, según afirmó en una entrevista con el Diario de Noticias , en ese centro no se respetan los derechos humanos--, será trasladado al palacio de justicia de Tudela para declarar el jueves a las cinco de la tarde como imputado en los citados asesinatos, aunque se prevé que llegue antes para reunirse con su abogado, informa Europa Press.

El Solitario está reclamado también por tribunales de Madrid, Toro (Zamora), Avila y Nules (Castellón), por una treintena de atracos y tres asesinatos.