Resulta difícil creer que tras todo lo ocurrido en los últimos días en el Ayuntamiento de Badajoz y su traslación a la política regional, ayer se reunieran en el consistorio el portavoz de Ciudadanos, Luis García-Borruel, y la primer teniente de alcalde del PP, María José Solana y no mencionasen la moción de censura. Ambos aseguraron no se puso sobre la mesa. Evitaron el tema o lo obviaron. Según manifestó Solana a la salida, si en estos momentos su grupo creyese que Ciudadanos va a apoyar la moción de censura que el PSOE está dispuesto a impulsar, no se reunirían, como hicieron ayer, para valorar y avanzar los acuerdos pendientes tanto del pacto de investidura como del presupuesto del 2016, siguiendo la «hoja de ruta» para cumplir «proyectos comunes». «Ninguno de los dos estaríamos para perder el tiempo», aseveró Solana, quien insistió en que en la relación entre ambos grupos no ha influido la situación excepcional de estos momentos. «Tenemos mucho más que nos une que nos diferencia», dijo.

La reunión fue a instancias del equipo de gobierno. Era la primera que se producía desde que se hizo público el anuncio del PSOE de la moción de censura. Borruel ha venido manteniendo que para que su grupo la apoye tienen que demostrarse casos de corrupción y que su partido nacional la autorice. Insiste en esta postura, aunque también en que ha perdido la confianza en el equipo de gobierno por los incumplimientos de los compromisos adquiridos con su grupo, a pesar de lo cual continúa confiando en que los cumpla. De hecho, la primer teniente de alcalde lo ha emplazó al 6 de marzo para concretar cómo están los temas pendientes, así como han fijado plazos para las comisiones de FCC, Ifeba y Aqualia. Para Borruel, eso ya es un paso adelante. «Yo creo que ahora sí tienen intención de cumplir los pactos» y «solucionar el problema». Solana, por su parte, señaló que no considera que Ciudadanos haya perdido la confianza en el PP. La reunión fue cordial y correcta y la concejala del PP negó que la convocase para recuperar la confianza de Ciudadanos, porque realmente «nunca» ha tenido la sensación de que no la hubiese en las conversaciones que han mantenido para el seguimiento de los acuerdos alcanzados entre los dos grupos. «Nunca ha habido situaciones de engaño o de ocultación», señaló.

Borruel se deja llevar y aunque manifestó que no hablaron de la moción de censura, sí reconoció a este diario que la reunión tuviese relación «probablemente» con el anuncio del PSOE, «del que yo no tengo nada que hablar».

El que sí habló ayer y mucho fue el delegado territorial de Ciudadanos Extremadura, Cayetano Polo, que no mantiene una relación especialmente fluida con Borruel, Según recogió Efe, Polo señaló que los concejales de C’s en el Ayuntamiento de Badajoz ni siquiera han traslado a la dirección regional y nacional del partido que existan motivos para plantear una moción de censura. A este respecto, Borruel respondió que no tienen que comunicar nada a su partido «porque nosotros no estamos en la moción», así como dejó claro que «no vamos a actuar en contra de lo que diga el partido».

Polo insistió en que «hoy por hoy» el portavoz socialista, Ricardo Cabezas, «tiene un proyecto de ciudad tan nulo o tan nefasto» como el alcalde del PP», por lo que «mientras no convenzan de lo contrario», Ciudadanos no apoyará la moción. A esta formación «no se le convence con anuncios de ir a la fiscalía ni, por supuesto, con publicaciones de redes sociales», sino «con hechos y realidades», reiteró. Polo señaló además que Ciudadanos «no apoya el circo en el que están convirtiendo la política municipal en Badajoz determinados grupos políticos», además de contestar a Cabezas que «cuando haya pruebas, delitos o corrupción, lo que hay que hacer es ir a la Fiscalía» y denunciar, pero sin previo aviso. El delegado territorial aclaró que no ha recibido ninguna llamada ni del PSOE ni del PP sobre este asunto y afirmó que tanto el presidente, Albert Rivera, como el comité ejecutivo están informados desde hace una semana de la situación de Badajoz y sus directrices también son contrarias a la moción de censura.

Ayer no fue el único que habló. También el portavoz del PP extremeño, Fernando Pizarro, valoró la situación del ayuntamiento pacense y exigió al líder del PSOE, Guillermo Ferández Vara, que «se manifieste» y «corte de raíz» la posible moción de censura para evitar que haya «consecuencias muy negativas» en las relaciones entre el PP y la Junta.

Vara todavía no ha dicho nada. Ayer estaba prevista su comparecencia en Mérida con el alcalde de Guadalupe, pero suspendió su asistencia media hora antes. Sí se pronunció el portavoz del PSOE, Miguel Ángel Morales, quien defendió «la obligación y la legitimidad» que tiene la oposición para «buscar la solución» a los problemas de «una ciudad paralizada». Como Podemos ya ha mostrado su disposición, «estamos esperando a que otro partido político (C´s) diga lo que tenga que decir», si bien no quiso valorar las declaraciones de Polo.