El Servicio Extremeño Público de Empleo (Sexpe) ha recibido una "avalancha" de solicitudes por parte de personas desempleadas mayores de 25 años que quiere ocupar una de las 50 plazas del próximo taller de empleo que va a poner en marcha el Ayuntamiento de Badajoz en el centro ocupacional Cerro de San Miguel. En total, se han valorado 2.472 solicitudes, aunque han sido más los demandantes, pues se han descartado los que no cumplían los requisitos, según la información facilitada por la directora general de Formación para el Empleo de la Consejería de Igualdad y Empleo, Gloria Fernández.

La directora general explica esta gran demanda en que dado el nivel de desempleo cada vez que la Administración saca alguna oferta "se produce un efecto llamada".

Este taller de empleo, como tal, tendrá una duración de doce meses y está dirigido a 50 desempleados mayores de 25 años que percibirán durante un año 950 euros al mes (1,5 veces el Salario Mínimo Interprofesional) a través de un contrato formativo. Los participantes alternarán la formación y el trabajo en tres especialidades: mantenimiento y reparación de edificios (15), pintura (15), fontanería (10) y electricidad (10). Su trabajo consistirá en completar las instalaciones del centro ocupacional, que se construyó con cargo al primer plan E y que se ha completado con la escuela taller que está ahora en marcha y que se solapará con este taller de empleo. En la escuela taller se están formando alumnos con edades entre 16 y 25 años y funcionará hasta noviembre del 2011.

Estos demandantes han tenido que responder a un formulario elaborado por el Servicio de Orientación del Sexpe que ha realizado una primera selección de la que finalmente se elegirá a las 50 personas que recibirán la formación en este taller de empleo, cuya actividad está previsto que comience a partir del próximo 1 de noviembre.

Gloria Fernández apuntó que una ciudad como Badajoz debe tener en marcha una escuela taller casi permanentemente y cuando se cambió la normativa que regula las escuelas taller, los talleres de empleo y las casas de oficio se introdujo la variable para que las grandes poblaciones tuviesen estas acciones formativas pues algunas no estaban acudiendo a la concurrencia competitiva.

Respecto a las especialidades que se imparten, Gloria Fernández señaló que a pesar de la crisis que vive el sector de la construcción no quieren dejar de trabajar formando a personas desempleadas en oficios que pueden seguir haciendo falta.