Los vendedores ambulantes entregaron ayer en el ayuntamiento tres propuestas para el diseño del futuro recinto que albergará el mercadillo de los martes en el antiguo ferial. Así, cumplen con el compromiso que adquirieron con el alcalde, Miguel Celdrán, tras la protesta que protagonizaron para mostrar su rechazo al recinto propuesto por el concejal de Mercados, Alberto Astorga.

En los tres diseños, las medidas superan los 120 por 120 metros previstos por el ayuntamiento, porque en esas dimensiones es "imposible" dar cabida a las 229 licencias. La primera propuesta contempla un recinto de 386 por 60 metros, con una distribución lineal de los puestos, seis entradas y una distancia de seis metros entre los puestos y la zona peatonal para, según defendieron, garantizar el acceso de los vehículos de emergencia. En la segunda propuesta plantean un recinto de 210 por 240 metros, con módulos también en línea y con cuatro entradas --y la posibilidad de ampliarlas--. El último diseño repite características, pero sus dimensiones son de 108 por 351 metros.

Los vendedores aclararon que no pretenden echar un "pulso" ni en éste ni en otros asuntos al equipo de gobierno, pero se mostraron dispuestos a defender sus intereses con firmeza. También destacaron que coinciden en la "base del proyecto" y en la necesidad de que haya mayor limpieza, por lo que repartirán las bolsas de basura "que el ayuntamiento no nos proporciona".