Aprovechando la visita del director general de la Policía Nacional, Germán López Iglesias, a las instalaciones de la jefatura, una docena de miembros del Sindicato Unificado de Policía (SUP) se concentraron para mostrar su rechazo a la actual jornada laboral y exigir que se regulen las «anomalías» que presenta. López Iglesias, junto a la delegada del Gobierno, Cristina Herrera, y el jefe superior de Policía, José Luis Izquierdo, se acercaron al grupo para escuchar sus demandas, aunque el SUP no logró arrancar ningún compromiso por parte del primero, que sí les aseguró que se está trabajando en ello. «Nosotros no vemos que se estén dando pasos en este sentido», criticó Pedro Donoso, secretario provincial del sindicato, quien recordó que hay una mesa de seguimiento de la jornada laboral que no se reúne desde hace un año cuando debería hacerlo cada seis meses. El SUP critica que se hayan destinado miles de euros a «pompa y boato» mientras el cuerpo sigue con carencias de personal.
Sobre la incorporación de efectivos, López Iglesias había explicado minutos antes a la prensa que desde el 2015 la tasa de reposición es del 100% y que la Oferta de Empleo Público del próximo año permitirá que crezca la plantilla que, según dijo, está cubierta al 85%.
El SUP tenía previsto realizar su protesta en la puerta de la Delegación del Gobierno, pero finalmente se decidió trasladarla a la jefatura para «no estropear» el acto de toma de posesión a los nuevos comisarios de Badajoz y Mérida.
