El deplorable estado del parque Santiago Arolo, los baches en las calles Alfonso XIII, General Mola o Luis de Zúñiga, los solares sin vallar en la avenida Manuel Rojas o en la calle La Paz, contenedores rotos que desprenden malos olores, zonas donde viven a sus anchas cucarachas y ratas o pasos de peatones invisibles por el desgaste de su pintura. Estos son solo algunos de los ejemplos que puso ayer la concejala socialista Antonia Márquez Anguita para denunciar el "progresivo deterioro" que sufre San Roque, y del que culpó al equipo de gobierno popular.

La concejala quiso citar a los medios de comunicación junto al parque Santiago Arolo, cuya fuente está destrozada y no funciona, según aseguró, "desde hace cuatro años". En este espacio se acumula la suciedad bajo los bancos "porque solo limpian cada 17 días" y uno de los muretes que lo rodean está caído.

Antonia Márquez Anguita reprochó al gobierno local que no se ocupe de poner solución a las muchas deficiencias que sufre la barriada, y venda "paja y humo" con grandes proyectos como la peatonalización del Casco Antiguo o los nuevos aparcamientos subterráneos. Añadió que pese a que ha denunciado públicamente en numerosas ocasiones los problemas de San Roque, el equipo de gobierno no ha adoptado ninguna medida para resolverlos y que lo único que demandan los vecinos son unas garantía mínimas de "seguridad, salubridad e higiene".

La concejala socialista apuntó que para que esto sea así, el primer teniente de alcalde, José Antonio Monago, a quien denominó "salvador de todo y arreglador de nada", y el alcalde, "desaparecido hace meses", deben cumplir con su obligación.