El grupo Socialista en el Ayuntamiento de Badajoz denunció ayer los trastornos que está causando la obra de desdoblamiento de la avenida de Elvas y la falta de previsión del ayuntamiento, que no ha informado puntualmente a los afectados de los pasos a seguir, según afirmó el concejal del PSOE Lorenzo Blanco. El socialista lamentó el retraso de la obra, que debía culminar a final de año y no lo hará hasta marzo, como mínimo, pues comentó que el ritmo de los trabajos es muy lento.

Blanco dijo que esta obra es un ejemplo de un "proyecto mal planteado, mal ejecutado, con múltiples molestias para los vecinos y un mal seguimiento por parte del ayuntamiento". Recordó que en verano se tuvieron que rectificar las rotondas ya construidas; luego el ayuntamiento cortó el tráfico de Saavedra Martínez y aunque anunció 8 o 10 días, pasó más de un mes y, lo último, cortan dos carriles entre los puentes de la Universidad y Real sin previo aviso.

También se quejó el concejal del PSOE de que no haya carril-bici en todo el tramo hasta Caya y criticó las dimensiones de los carriles, que quedarán bloqueados si se avería un coche.

LIGERO RETRASO El concejal de Tráfico y de Infraestructuras, Alejandro Ramírez del Molino, recordó a Lorenzo Blanco que más retrasada va la obra de desdoblamiento de la carretera de Valverde, que compete a la Junta y que todavía no ha empezado. Ramírez del Molino reconoció que las obras de la avenida de Elvas van "ligeramente retrasadas" y estimó que no se alargarán más de dos o tres meses.

El concejal del PP recordó al socialista que el Ministerio de Fomento contempla el carril bici entre el puente Real y la universidad, por la margen derecha en dirección a Portugal y el ayuntamiento va a intentar incorporar este carril hasta el puente de la Universidad. "Se están haciendo los estudios pertinentes, para ver si hay posibilidad", afirmó. Reconoció que los problemas que se están produciendo son los propios de una obra de esta envergadura, "pero estamos tratando de solucionarlos de la mejor manera posible". Tan pronto como se vayan cerrando las glorietas se abrirán al tráfico, como ha ocurrido con la de Saavedra Martínez y la de la universidad, que también se ha abierto. El resto se irá haciendo como lo permita la climatología.

Sobre la falta de información a los vecinos, Ramírez del Molino afirmó que "los vecinos están perfectamente informados, sabían cómo iba a ir la obra" y si puntualmente se ha modificado una glorieta un fin de semana ha sido porque son los días que menos perjuicios se producen. Asimismo, el concejal aseguró que dadas las dimensiones de los carriles dos camiones "pasan perfectamente por las rotondas" y que en el caso de avería de un coche, el carril se corta aunque su anchura sea mayor.