El grupo socialista en el Ayuntamiento de Badajoz sigue la hoja de ruta marcada cuando decidió impulsar una moción de censura que desbanque del gobierno municipal al PP. Incluso va a adelantar los plazos previstos, después de que ayer por la tarde, la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE, con Guillermo Ferández Vara al frente, diese via libre al portavoz, Ricardo Cabezas, para iniciar los contactos con Podemos Recuperar Badajoz y Ciudadanos, cuyos votos son imprescindibles para presentar la moción.

El PP cuenta en el ayuntamiento con 13 concejales, frente a los 9 del PSOE, que necesitaría los 3 votos de Podemos, cuyo portavoz, Remigio Cordero, ya ha mostrado públicamente la disponiblidad de su grupo, y los 2 de Ciudadanos. Su portavoz, Luis García-Borruel, de momento no ve motivos para sumarse y pone como requisito que se demuestren casos de corrupción por parte del gobierno municipal.

La reunión se celebró en Mérida y estaba convocado todo el grupo municipal socialista. Asistieron los nueve concejales. Cabezas explicó los motivos de la decisión de impulsar la moción de censura a partir de lo cual se generó un debate, que concluyó con la petición por parte de la Comisión Ejecutiva Regional al grupo municipal de que concrete en qué va a consistir el posible acuerdo, con qué apoyos va a contar y la elaboración de una propuesta conjunta de los que posibiliten el nuevo gobierno municipal los próximos dos años. El siguiente paso entonces es iniciar los contactos.

Cuando Cabezas anunció a través de este diario la decisión de su grupo de impulsar la moción de censura, señaló que su intención era empezar a negociar con los otros dos grupos de la oposición en el ayuntamiento después de los Carnavales, el 1 de marzo. Esta previsión se ha anticipado. «Hemos salido con el encargo de empezar ya», manifestó Cabezas, Según comentó a este diario, ya ha entregado el informe de tesorería a Borruel sobre las presuntas irregularidades que el PSOE ha detectado, en relación a los posibles cobros irregulares por parte de los alcaldes de los poblados y la semana próxima le hará llegar el informe del secretario general sobre el mercado de Al Mossassa. Cabezas entiende que son los órganos nacionales de Ciudadanos los que tienen que dar la autorización, como ocurrió en Granada, donde el PSOE llegó a un acuerdo con Ciudadanos.

Con Remigio Cordero espera hablar hoy mismo y pedirle que convoque su asamblea local y someta a su consideración si este grupo municipal está dispuesto a sumarse a la moción de censura. Con ambos grupos empezará a negociar un programa de mínimos para lo que resta de legislatura.

Durante el debate de ayer se puso sobre la mesa la posible repercusión en la Asamblea. Cabezas opina que de cualquier manera el presidente del PP, José Antonio Monago, endurecerá su oposición en el tiempo que resta hasta las elecciones.Mientras en Mérida se reunía la Ejecutiva Regional del PSOE, Monago participaba en Badajoz en un encuentro con alcaldes. Al inicio y a preguntas de la prensa, habló sobre la posible moción de censura. No dejó pasar la oportunidad para defender que «lo razonable es que quien gana las elecciones gobierne» y recordar que el PP lo permitió en las últimas elecciones autonómicas, pues «ir contra» del sentir mayoritario de los ciudadanos «es un error para el PSOE que lo va a pagar en la ciudad, tarde más o menos». El presidente del PP tachó de «ruido mediático» las pretensiones del PSOE municial, porque no cuenta aún con todos los apoyos. Sobre la repercusión en la Asamblea, comentó que si Vara devuelve «una moneda distinta» de la que «se benefició» en las últimas elecciones, «las cosas cambiarán».