El puente de ronda norte, construido por la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) en la carretera de circunvalación, y que conecta el centro de la ciudad con la parte nueva de la barriada de San Roque, abrirá mañana al tráfico tras concluirse la obra, incluida en el proyecto contra avenidas de los arroyos Rivillas y Calamón que desarrolla la confederación.

Los operarios terminarán hoy de cerrar una zanja que hubo que abrir para una conducción de Sevillana Endesa y la cubrirán con aglomerado, por lo que mañana estará listo, según declaró ayer a este diario el director de la obra, Ramón Salas.

La apertura del puente, que tiene 21 metros de anchura con dos carriles para cada sentido y aceras de tres metros de ancho, estaba prevista para el pasado enero pero se retrasó porque fue necesario construir una rotonda que lo conectara con la carretera de circunvalación, que entró en servicio hace unas semanas.

LOS REMATES Ramón Salas explicó que una vez abierto al tráfico este puente se procederá a rematar la isleta de la rotonda y el acerado y se completará también la señalización.

Este puente junto con el de San Roque, que será el próximo que se derribará para construir otro nuevo en su lugar, son, según Ramón Salas, los que más tráfico de vehículos soportan de los nueve puentes que se incluían en el proyecto de los arroyos Rivillas y Calamón.

Próximo al de ronda norte la CHG está acometiendo la obra del puente del Revellín, donde ya se ha colocado una enorme viga. Cuando este paso esté operativo se procederá al derribo del puente de San Roque, que es la entrada principal a la avenida Ricardo Carapeto.

Una vez concluya la actuación de la confederación en esta zona de la ciudad y esté terminado el nuevo puente de San Roque, esta barriada quedará mejor comunicada y verá solventado sus actuales problemas de tráfico.