El ciudadano Juan Enrique Toledano tiene dos denuncias en curso, una contra el anterior Insalud y otra contra el actual SES, por supuestas negligencia médica y denegación de asistencia, respectivamente, que tienen parada de momento una reclamación patrimonial de 300.506 euros, hasta que haya una resolución judicial. Dicha reclamación se corresponde con la primera de las causas.

La denuncia por negligencia médica la presentó el 2001 en el juzgado número 2, que la archivó. Fue recurrido y la Audiencia ordenó su reapertura y que se investigue. La segunda, en el juzgado 5, corrió igual suerte y el recurso sigue en marcha.

Los hechos ocurrieron en 1997, cuando Toledano fue operado "de atrofia maxilar severa con 16 implantes dentarios, que más adelante se comprobó que fueron sólo 15 y con perforación nasal", y que, según certificados adjuntos, fue la causa de sus dolencias posteriores.

Explicó el enfermo que siendo alérgico a la penicilina se le trató con derivados de ésta, que al cortar un trozo de la cadera le seccionaron el nervio iliaco causándole pérdida de sensibilidad, además de parestesia orbital, infecciones recivantes en la boca y, según otro informe la Clínica Universitaria de Navarra, un cuadro de poliposis colónica con extirpación de 30 pólipos puede estar ligado a problemas de boca".

CAMBIO DE PROTESIS

Asimismo, a raíz de un informe médico que le dice que debe ser revisado en el servicio de Maxilofacial, derivaron al paciente a Madrid, donde se le indica que se le deben retirar los implantes y cambiar la prótesis, "lo que no se ha hecho desde agosto del 2002", motivo por el que denunció la denegación de asistencia, pues se le dijo que el SES asumía la asistencia pero no la prótesis, según al catálogo de prestaciones.

El afectado ha manifestado que se siente como "una cobaya humana", que no entiende cómo si su caso no está en el catálogo de prestaciones se le hizo la operación en su día, por qué la empresa que se dijo que proveía los implantes niega su participación en la operación, o que los números de serie de sus implantes no coincidan con los que vienen la factura, o que no aparezca el certificado sanitario de los mismos, entre otras cosas.