El proyecto de rehabilitación del antiguo hospital provincial de Badajoz, cuya primera fase contempla actuar sobre 3.000 de los 24.000 metros cuadrados del inmueble, tiene como guías de intervención la continuidad del espacio, la polivalencia de usos y la generación de economías.

Los detalles del proyecto han sido desgranados hoy en rueda de prensa por el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, y el ganador del proyecto, el arquitecto José María Sánchez.

La propuesta "modificará el centro" de la capital pacense", ha dicho Sánchez, autor de proyectos como el centro de innovación deportiva El Anillo de Guijo de Granadilla (Cáceres), la hospedería de Olivenza (Badajoz) y la adecuación y recuperación del entorno del templo de Diana de Mérida.

Para Gallardo, el proyecto se sostiene en el entendimiento del edificio como un espacio urbano, mediante la recuperación y revalorización de los espacios y elementos históricos de interés, y la adecuada incorporación del edificio a la ciudad.

Según Sánchez, el edificio, pero sobre todo su planta baja, se define como una ciudad dentro de la ciudad de Badajoz, de ahí que el lema del proyecto sea "Una edificio como una ciudad".

La planta baja se concibe como un gran intercambiador urbano, un espacio devuelto a la ciudad, con cuatro accesos -uno por fachada- y numerosos espacios rectangulares, destinados inicialmente a la creación de un "espacio gourmet".

"Dará sensación de que uno está en la calle", ha apuntado el arquitecto, que ha apostado por "una homogeneización" del edificio, donde la tabiquería será sustituida por módulos de madera polivalentes, y donde los patios del edificio se "convertirán en plazas".

Todo ello, según ha explicado Gallardo, "respetando el edificio y el patrimonio". "Estoy convenido de que estamos convirtiendo un problema en una oportunidad", ha afirmado. De hecho, el proyecto respeta la volumetría y las fachadas del inmueble.

En su interior, se recuperan los volúmenes originales de las salas abovedadas, "evitando así compartimentaciones innecesarias"; se definen "galerías perimetrales", los pasillos "serán calles", mientras que las plantas superiores se reservan para usos diversos, como pueden ser la Escuela Oficial de Idiomas y una biblioteca.

"A medida que se vaya ascendiendo habrá más privacidad", ha remarcado.

El solado de la planta baja será de piedra, como una calzada y las paredes irán encaladas en blanco "lo más parecido a los orígenes del edificio", ha insistido el arquitecto.

Gallardo se ha mostrado "enamorado" de la reforma del inmueble y convencido de que para Badajoz será una sorpresa muy agradable.

El proyecto, que esta tarde será presentado a la corporación del Ayuntamiento de Badajoz, podría iniciar sus obras en el último cuatrimestre del año.

"La diputación pone la idea y el dinero necesario, un millón de euros, aunque es una partida ampliable", ha manifestado Gallardo, quien ha apuntado la inversión de dos millones de euros que acometerá la Junta de Extremadura para la Escuela de Idiomas.

Sobre la forma de gestión de aquellos espacios de generación económica, como es el mercado gourmet, Gallardo ha apostado por la creación de una empresa pública de carácter mixto en la que participen la Diputación de Badajoz, Junta, ayuntamiento y capital privado.