El Ayuntamiento de Badajoz ha hecho los deberes en el 2016 según se desprende de la liquidación del presupuesto municipal del año pasado, que pasó ayer por la Comisión de Economía, Hacienda y Patrimonio y va el viernes al pleno, junto a los dos informes de la intervención general sobre la evaluación del cumplimiento del gasto consolidado y del objetivo de estabilidad presupuestaria. La liquidación arroja el dato del remanente líquido de tesorería, que es del que se nutren principalmente las inversiones a través del Plan de Impulso a la Economía Local, y que se eleva a 37.127.000 euros.
La concejala del área, Maripaz Luján, apuntó que esta cantidad no se puede invertir en su totalidad porque la ley establece restricciones vinculadas precisamente a las obligaciones de las administraciones de estabilidad presupuestaria y al techo en el gasto. El año pasado el remanente de tesorería superó los 54 millones de euros, pero Luján recordó que se amortizó deuda bancaria por casi 28 millones de euros. Otra magnitud que destacó fue el nivel de endeudamiento del Ayuntamiento de Badajoz, que es del 18,23%, cuando las corporaciones locales pueden endeudarse hasta el 75% (e incluso hasta al 110% con autorización del Ministerio de Hacienda). Para Luján, este dato refleja «la credibilidad que tenemos en el sector bancario, con los proveedores y todos aquellos que trabajan con el ayuntamiento», a la vez que «demuestra un estado muy saneado». La concejala se refirió también al cumplimiento efectivo de la estabilidad presupuestaria y al techo de gasto, según los informes de intervención
De la liquidación del presupuesto se obtiene otro dato y es que el 2016 terminó con un superávit de 11.151.512 euros (el año anterior fue de 3 millones).
