Agentes de la policía local, ayudados por varios vecinos, rescataron la tarde del martes a un perro del canal del arroyo Rivillas. El animal se encontraba sin fuerzas y en «muy mal estado» y estaba cubierto de algas, moscas y sanguijuelas y con la cabeza metida en el agua sucia.

El perro no tenía microchip, pero tras diversas gestiones, la Unidad Canina, en colaboración con la Unidad de Proximidad, logró dar con su propietario, un hombre de 33 años que, según fuentes policiales, explicó que el animal había sido un regalo para su hijo de 8 meses, pero que enfermó y no pudo hacer frente a los gastos de las curas. Según contó, la mascota se había escapado hacía unos días de su domicilio, pero no lo había denunciado.

El hombre, contra el que se han abierto diligencias por un presunto delito de abandono y maltrato animal, reconoció que el animal no había sido vacunado.Una vez rescatado, los agentes contactaron con la clínica veterinaria Clinivex, donde el perro fue atendido y continuaba ayer recuperándose.