Sol, calor y un intenso olor a romero fueron los ingredientes de una mañana repleta de luz en la que se celebró un espectacular ejercicio militar que culminó con una exhibición aérea en la zona del Guadiana y El Pico, entre los cerros de San Cristóbal --coronado por el fuerte del mismo nombre--, y de la Muela --por la alcazaba--. El ejercicio reunió a más de 50.000 personas, según contabilizó a la policía local a las doce del mediodía. Esas mismas fuentes indicaron no dejó de incorporarse público durante el tiempo que duró la demostración, por lo que la cifra podría ser muy superior.
Ataviados con gorras y botellas de agua, miles de jóvenes, personas mayores, grupos y familias se apostaron sobre las citadas fortificaciones y laderas de sendos cerros, en el puente de la Autonomía y las carreteras de Cáceres y de Circunvalación para seguir los ejercicios militares.
La operación se concretó en el rescate de una treintena de delegados y diplomáticos de una misión de la ONU, que había sido capturada por un grupo insurgentes y que debían liberar unidades de una fuerza multinacional liderada por España. Una misión que podría darse en Afganistán, Bosnia, Líbano, Somalia, o alguno de los países en conflicto en los que interviene o con los que colabora el Ejército español.
A RITMO DE BONNIE TYLER Intervinieron 420 militares de Tierra --con vehículos Pizarro, carros Leopard, helicópteros Chinook y el nuevo Tigre que se utilizará en Afganistán--, infantes de Marina de la Armada --con lanchas y helicópteros--, del Aire --con aviones F-18. C-295-- y, finalmente, la patrulla Aguila, que causó una gran impresión en el público con su exhibición acrobática, en la que participaron seis de sus siete pilotos.
El simulacro comenzó puntualmente a las doce del mediodía con el lanzamiento de precisión de una unidad paracaidista y un pase de cazas F-18 con música de Bonni Tayler --´Necesitamos un héroe´-- sonando por megafonía en un remedo de ´Apocalypse Now´ con su ´Valkyries´ de Wagner.
Unas lanchas surcaron el Guadiana, aguas arriba en dirección al Pico. Los ´paracas´ tomaron tierra, intervinieron los vehículos acorazados y carros de combate de la Brigada Extremadura XI, fuerzas aerotransportadas bajaron de los helicópteros por cuerdas a unos 10 y 30 metros del suelo y la aviación hizo su tarea de limpieza desde el aire.
Los infantes y los soldados de tierra tomaron el puesto de la ONU, pusieron a los insurgentes en fuga y concluyeron el rescate.
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