Un camión-grúa retiró pasadas las nueve de la mañana de ayer, la estatua erigida a José Salazar, el cantaor pacense y extremeño más famoso de todos los tiempos, conocido --por sus cantes y sus saetas a la Virgen de la Soledad-- como Porrina de Badajoz, o marqués de Porrina, con motivo de las obras que se llevan a cabo en la plazuela de la Soledad.

Estas obras se realizan con cargo a los fondos estatales de inversión local, dentro del programa de actuaciones del Plan E en Badajoz, para convertirla en plataforma única.

La figura del cantaor heterodoxo (1924-1977), dandy gitano con clavel rojo en la solapa y gafas de sol todo el año, voló por unos momentos para ser transportada hasta la caja del camión desde su pedestal. Posteriormente fueron trasladados, figura y pedestal, hasta un almacén municipal, donde permanecerá a buen resguardo mientras duren las obras, unos seis meses aproximadamente.

La estatua es obra del escultor Cuevas Lozano y la inauguró en la plaza de la Soledad el entonces alcalde, Manuel Rojas, en el año 1986.

Las obras de la plaza de la Soledad comenzaron hace un mes. El proyecto contempla cortar el tráfico por la plazoleta y dejar solo los viales laterales, con todo el espacio al mismo nivel y peatonal. Una vez terminada la obra, el marqués de Porrina volverá a estar frente a la patrona de Badajoz, pero esta vez a pie de calle, sin pedestal.