La acción incontrolada del hombre ha conseguido que el río Guadiana, en su tramo urbano, presente una situación "bastante lamentable" y que la vegetación se encuentre muy degradada, según el profesor de Botánica de la Escuela Superior de Ingenierías Agrarias de la Universidad de Extremadura (Uex), Pedro Gómez Hernández. Este profesor participó en las III Jornadas sobre el Río Guadiana que ha organizado la Real Sociedad Económica Extremeña Amigos del País, de la capital pacense, y que se prolongarán hasta junio.
Las orillas del río Guadiana, a su paso por Badajoz, muestran una vegetación variada, desde la leñosa, como alisos, fresnos, y sauces, hasta tamujales y atarces. También se pueden ver plantas herbáceas, como los juncos, y las hay aromáticas, entre ellas los poleos y las mentas, además de las algas microscópicas, según Pedro Gómez, quien asegura haber visto algún ejemplar de planta insectívora.
Sin embargo, la situación actual del agua del río y de sus orillas "no invita a acercarse al Guadiana, el agua está sucia y maloliente y hay acumulación de residuos". Según este experto en Botánica, en esta zona entran coches y se acampa con cierta facilidad, "por lo que los atarces que hay en El Pico están muy destrozados y hay mucha suciedad". En su opinión, "las depuradoras no funcionan lo bien que deberían funcionar".
Por ello, considera necesario que tanto las autoridades como los ciudadanos se impliquen en la recuperación del río y de la flora del entorno, ya que "gran parte de la vegetación se está perdiendo y ofrece un paisaje alterado", según señaló.
Pedro Gómez se mostró partidario de acometer actuaciones concretas para "salvar" el río y rehabilitar la margen derecha con "un proyecto más blando que el que se acometió con la otra margen, en la que se empleó demasiado hormigón", con el fin de conseguir una zona atractiva que invite a disfrutar del río y a mantenerlo en las condiciones adecuadas para poder acercarse a él.
