La rotura de una de las principales tuberías de la red general de abastecimiento provocó ayer la inundación de algunas calles de la barriada de Las Moreras, llegando a anegar garajes y locales de la calle Mario Rosso de Luna.

El reventón se produjo a las diez de la mañana en la tubería que atraviesa el puente de la Universidad junto al hotel Río y el agua se agolpó en el túnel que hay bajo el puente y que estaba tapiado. La presión del agua rompió el tabique y en pocos minutos el agua anegó la calle Rosso de Luna y alcanzó a otras colindantes, como Matías Ramón Martínez y Luis Landero.

Los vecinos avisaron a los bomberos y a la Policía Local, que junto con los técnicos de Aqualia, la empresa adjudicataria del servicio del agua, se desplazaron al lugar. Los más afectados fueron los de los bloques 1 y 3 de Rosso de Luna, a los que se les inundaron las 56 plazas de garaje, algunos trasteros y locales ubicados en los bajos.

Esta avería tuvo repercusión en toda la ciudad, ya que el suministro permaneció cortado alrededor de media hora y aunque a las once de la mañana estaba reestablecido, según Aqualia, en muchos puntos el agua llegó con poca presión y turbia hasta cerca de las doce. También hubo que cortar al tráfico un carril del puente de la Universidad.

Una de las vecinas, Emilia Márquez Acosta, que se disponía a salir de su casa se encontró la calle convertida en una gran balsa de agua. "Me puse muy nerviosa, no paraba de salir agua, y avisé a los vecinos para que sacaran los coches del garaje", relataba mientras los operarios de Aqualia extraían el agua del garaje con una motobomba.

Los vecinos mostraron su indignación porque ésta es la segunda vez que se inunda su calle, "hace casi tres años se llenó todo esto de agua por la rotura de otra tubería", según el vicepresidente de la asociación de vecinos de Cañada-Moreras-Jardines del Guadiana, José Antonio Macarro, que también se vio afectado y fue con otros vecinos a denunciar el hecho ante la Policía Nacional.

Algunos de los afectados apuntaron al ayuntamiento como responsable del problema, sin embargo, el concejal de Vías y Obras, Alejandro Ramírez del Molino, recordó que ésta es una competencia de Aqualia, "que es la que tiene la responsabilidad de reparar los daños causados, como ya ha hecho en ocasiones anteriores", señaló. Por su parte, la empresa aseguró que se hará cargo de las reclamaciones.

Aqualia no concretó las causas del reventón, que atribuyó a "la presión del agua, ya que ésta zona es un punto de máxima presión, o las raíces de un árbol situado junto al hotel Río". El citado árbol, una falsa pimienta de la familia de las acacias, con 40 años, fue cortado por los bomberos, ya que se encontraba justo donde reventó la tubería y entorpecía la labor de los técnicos de Aqualia que al cierre de esta edición todavía trabajaban en renovar el tramo de tres metros de la tubería rota.