El servicio de bomberos del ayuntamiento recibió el miércoles a las 19.50 horas el aviso de que una tubería de suministro de agua potable se había roto en la calle Zurbarán, a la altura de Mazda, lo que provocó que entrase agua en el garaje del edificio de viviendas. Aqualia cortó el agua, que volvió ayer por la mañana.