La Delegación Diocesana de Carreteras de la archidiócesis de Mérida-Badajoz celebrará el domingo de once a doce de la mañana en la alcazaba un acto que consistirá en la bendición de todos los vehículos que acudan a este evento, al que están invitados los conductores de la ciudad.

Se instalará para la ocasión un altar presidido por San Cristóbal, patrón de los conductores, cuya imagen será trasladada hasta la alcazaba en un furgón. Se ha descartado llevarlo en procesión porque muchas calles del Casco Antiguo se encuentran levantadas por obras.

Uno de los responsables de esta delegación diocesana, Agustín Pérez, explicó que esta actividad forma parte de una jornada de responsabilidad en el tráfico, con la que además se pretende rescatar una tradición que se mantuvo hasta los 60 en la ciudad, cuando salía San Cristóbal.