La calle San Juan se encuentra ya abierta a los peatones después de ocho días cerrada debido al desprendimiento de dos edificios en ruina, que obligó a impedir el acceso a la calle hasta garantizar la seguridad de los peatones y de los vecinos de la zona.

Una vez consolidadas las fachadas del número 11 y del 13, el sábado se abrió la calle y ayer se iniciaron los trabajos de demolición en el interior de los inmuebles, concretamente ayer trabajaban en el número 13.

Una de las cuestiones que más preocupa ahora a vecinos y comerciantes, y que nadie pudo responder, es el tiempo que durarán estas obras, que tienen ocupada más de la mitad de la calle San Juan, con las consiguientes molestias que ello ocasiona.

Todos los negocios pudieron ya abrir sus puertas, aunque los comerciantes afectados estudian cómo van a reclamar a los propietarios de los inmuebles en ruina los perjuicios ocasionados a sus negocios. Unos prevén hacerlo de manera conjunta y constituir una plataforma de afectados, sin embargo hay otros que prefieren hacerlo por separado.

Uno de los negocios afectados ha sido Modas Redondo que en plena campaña de verano ha permanecido ocho días cerrado.

Algunos se quejaron de los pocos clientes que ayer llegaban a sus establecimientos, "la gente viene con miedo y otros todavía no se han atrevido a venir porque no saben que la calle está ya abierta. Tendrán que pasar varios días para que esto vuelva a la normalidad", señalaron.