Las vacas de Wisconsin, de Sara Traba, ganó el Premio al Mejor Cortometraje en el 23 Festival Ibérico de Cine (FIC), que se clausuró anoche con la entrega de los Premios Onofre, en una ceremonia celebrada en La Terraza, presentada por el humorista Goyo Jiménez. Traba también se llevó el de Mejor Dirección. Narra la historia de una anciana que vive en una aldea gallega con su vieja vaca, que ya no da leche; escucha que la Universidad de Wisconsin ha descubierto que las vacas dan más leche si escuchan música sinfónica y busca una solución.

El Premio del Público de Badajoz fue para el divertido The app, de Julián Merino, protagonizado por Carlos Arece, que cuenta cómo Benito alcanza el éxito gracias a las órdenes de una aplicación de móvil

Ainhoa, sobre los desahucios, dirigido por Iván Sáinz-Pardo, obtuvo el Premio del Público de Olivenza y el de Mejor fotografía, realizada por José Martín Rosete. La conmovedora historia de Javier Fesser, 17 años juntos, recibió el del Público de San Vicente.

El Premio Cexeci del Jurado Joven fue para el corto luso de animación Estilhaços, de José Miguel Ribeiro, que acumula numerosos galardones, entre ellos el Sophia al Mejor Corto de Animación. Aborda el impacto de la guerra en las relaciones humanas, de un padre y un hijo.

Australia consiguió dos premios: Mejor Guión, de Pablo Remón y Lino Escalera; y AISGE al Mejor Actor para Ferrán Villajosana.

Irene Anula recibió el AISGE Mejor Actriz por Vampiro, del valenciano Álex Montoya que cuenta la historia de un guionista, en busca de documentación para su próxima película, Es habitual en las películas de Álex Montoya.

El AEC a la Mejor Música fue para Ricardo Boya por Zona-84, postapocalíptica, con crítica social, dirigida por Lonan García.

El Filmoteca de Extremadura fue para Nerón, de Rubin Stein, de Navalmoral de la Mata, suspense en blanco y negro, producido por Nirvein, segunda entrega de la trilogía Luz&oscuridad. La primera, Tin&Tina, cosechó numerosos premios y ha pasado por más de 200 festivales de todo el mundo.

Esta película competía con otras dos extremeñas, El escondite, de Ismael Chaka (Badajoz) y Duelos, de Yolanda Román (Navalmoral de la Mata), que fueron los seleccionados entre los diez que concurrieron en esta edición al Certamen Extremeño de Cortos.

Por otro lado, tras la proyección de los cortos extremeños se estrenó el documental 5105. Historia de una fuga de Mauthausen, dirigido por Diego González, producido por Dosde Extremadura Media y Synopsis 103. El documental narra la historia de Agustín Santos, un joven extremeño que logró fugarse del campo de concentración de Mauthausen con dos españoles.