El Juzgado de lo Penal 1 suspendió ayer por segunda vez el juicio contra S. P., de nacionalidad rumana, acusado de un delito de prostitución y otro contra los derechos de los trabajadores, por los que el fiscal solicita un total de cinco años de prisión, la acusación particular 6 y la defensa pide la libre absolución.

El juicio se suspendió ayer debido a la enfermedad del abogado defensor, aunque acudieron el acusado y el resto de las partes. La juez señaló la próxima vista oral de esta causa para las 9.30 de la mañana del próximo día 24.

La suspensión anterior tuvo su origen en la ausencia de varios testigos, al menos dos de la defensa y uno del fiscal, que se consideraron necesarios para determinar los hechos juzgados. En la primera parte de la vista oral prestó declaración el acusado, que negó las acusaciones de las que es objeto por parte del fiscal y la acusación particular, e intervino una mujer como testigo protegida.

S. P. tenía que haber sido juzgado el juicio por prostitución que se vio en el Juzgado de lo Penal número 2 en diciembre pasado, al ser el conductor de uno de los inculpados en aquella causa, C. S., propietario del local de alterna La Viña, sito en la provincia de Toledo. No lo fue porque quedó fuera de la causa al no comparecer, pues se hallaba en paradero desconocido, según fuentes de la acusación, y hubo que continuar las diligencias, de forma que se abrió una causa aparte.