Un grupo de niños gitanos del casco antiguo, con edades comprendidas entre los 6 y los 12 años (correspondiente a Primaria), ha participado en agosto en un taller de apoyo escolar que, entre sus objetivos, se marcó que estos pequeños no perdiesen el hábito de la escuela, adquirido en invierno, un logro importante si se tiene en cuenta el problema de absentismo escolar de esta población.

La concejala de Servicios Sociales, Cristina Herrera, destacó ayer que aunque este taller se realiza desde hace cinco años, en esta ocasión ha sorprendido la elevada participación, pues la actividad ha aglutinado a un total de 44 niños, que representan el 73% de los pequeños de etnia gitana que viven en esta zona de la ciudad. Más de la mitad de los participantes (25) eran niñas.

Este taller se incluye en el Programa de Desarrollo Gitano, cuyo coordinador Víctor del Prado, compareció junto a la concejala del área. Herrera destacó el éxito "cualitativo y cuantitativo" de esta actividad, que se ha realizado de lunes a viernes durante todo el mes de agosto desde las diez de la mañana hasta las dos de la tarde, con contenidos de apoyo escolar y acciones lúdicas.

El objetivo de este taller es no interrumpir la actividad que se realiza durante todo el año, edulcorando la formación propiamente dicha o el repaso de contenidos de la enseñanza, con juegos, manualidades y visitas.

VOLVER A UN ORDEN Lo que se pretende es que "el verano no suponga un corte para estos niños a los que tanto cuesta, tanto a nivel personal como familiar, que vuelvan a un orden", dice Herrera. Además de recibir clases con contenidos básicos de Matemáticas y Lengua, se ha propiciado el desarrollo de hábitos de convivencia y los de rutina escolares adquiridos en el curso anterior, así como el conocimiento de su entorno.

En esta línea, se han organizado juegos en la alcazaba y se ha visitado una biblioteca y los talleres del parque de Castelar, además de actividades deportivas. Al final, según la concejala, se ha conseguido aumentar la motivación de estos pequeños en el aprendizaje los hábitos diarios de puntualidad y de las normas y cuidados del entorno.