La Asociación Dando C@lor no cierra por vacaciones. Sus voluntarios continúan alegrando y apoyando a los niños ingresados en el Materno Infantil y en el Perpetuo Socorro (Oncología) y a sus familias durante el verano a través del programa El hospital está en obras... de teatro. Magos y payasos se cuelan así en los centros hospitalarios para tratar de hacer más llevadera la estancia de los más pequeños y sus padres.

Los voluntarios cuentan con el apoyo de actores en sus representaciones de clown, magia y circo, que se realizan en un espacio común para los niños que pueden salir de sus habitaciones. En caso contrario, se trasladan a propios sus cuartos, donde hacen una «miniactuación». Estas representaciones se llevan a cabo una vez por quincena durante julio y agosto, meses en los que también se mantienen las sesiones de cienciaterapia, en colaboración con una asociación de Huelva, y el programa de respiro familiar, que permite a los padres disponer durante unas horas de tiempo libre mientras los voluntarios acompañan a los niños con juegos y talleres --el último ha sido de caricaturas-- Además, se programan distintas fiestas temáticas. La de agosto se dedicará a la playa.

José Antonio Rosa, coordinador de programas de la Asociación Dando Col@r, resaltó el esfuerzo que realizan los voluntarios para mantener estas actividades durante la época estival. «El programa nace de la inquietud de que en verano haya una oferta de ocio para los chicos porque la enfermedad no entiende de vacaciones. Hay otras épocas que se cuidan mucho más como la Navidad, pero queríamos llevar las risas y la frescura con actividades especiales a los niños que no tienen oportunidad de ir a la playa o a la piscina», explicó.

Rosa destacó los beneficios que este tipo de actividades tienen tanto para los menores como para los padres, independientemente del tiempo de estancia. «Para quienes están en Oncología es beneficioso para la propia enfermedad, pero para el niño que vaya a ser operado de fimosis es también muy importante que esté entretenido y no pensando en la intervención», citó como ejemplo.

Dando Cal@r trabaja durante todo el curso en el hospital con actividades de ocio, pero sobre todo a través de los programas de respiro familiar y apoyo escolar. No cuenta con financiación pública y su presupuesto es de apenas 4.500 euros, que en su mayor parte se destinan a la formación que se da a los voluntarios, que es continúa y obligatoria. La asociación tiene 76 voluntarios y un equipo de formación integrado oncólogos, enfermeros, trabajador social y psicólogo. «Para superhéroes, los niños y sus familias y estos voluntarios», valoró Rosa.