Todas las paradas del servicio público de alquiler de bicicletas, Biba, contarán con monitores con pantallas táctiles antes de final de año. La renovación de estos puntos se llevará a cabo con una inversión de casi 26.000 euros, incluida en el Plan de Impulso de la Economía Local. Ahora solo la parada de la plaza de España dispone este tipo de monitores, que se ampliarán a las 25 estaciones de bicicletas que hay repartidas por la ciudad.

Las incorporación de estas nuevas pantallas táctiles permitirá mejorar el servicio e incrementar las prestaciones. En este sentido, el concejal responsable del servicio de alquiler de bicicletas, Jesús Coslado, explicó la renovación de los monitores conlleva que también se actualice el software de todas las paradas, lo que permitirá ofrecer nuevas opciones a los usuarios, entre ellas, el pago de la tasa con tarjeta de crédito a través del terminal, para lo que aún se está pendiente de que se facilite la pasarela de pago con la entidad financiera (ahora hay que ir a recoger el justificante al servicio de Recaudación).

También, una vez sustituidas las pantallas actuales por las táctiles, los usuarios podrán utilizar las bicicletas sin necesidad de que lleven encima su tarjeta de abonado, pues bastará con introducir el número del DNI y la contraseña de cada uno para retirar el vehículo.

En la memoria en la que se justifica la renovación de los monitores de todas las paradas de bicicletas de alquiler por otros con pantalla táctil también se alude a que, debido a las inclemencias meteorológicas y los actos vandálicos, en varias estaciones han quedado «inutilizados», perjudicando a los usuarios, por lo que su sustitución también es necesaria para continuar con la prestación en «correctas condiciones de operatividad». En este sentido, se menciona la necesidad de que se unifique el sistema con elementos de mayor resistencia tanto por su ubicación a la intemperie como por el vandalismo.

Por otro lado, el nuevo software, según explicó Coslado, también va a posibilitar que se vayan instalando los candados para la incorporación en el futuro de las bicicletas eléctricas. Aunque aún no hay ningún vehículo de este tipo disponible en el servicio, ya se han probado algunos modelos, pues la voluntad del ayuntamiento es que estén en uso el próximo año, como ya informó este diario. La idea es que reemplacen de manera progresiva a las convencionales, con el objetivo de fomentar su uso entre los ciudadanos, ya que mayoritariamente se utilizan como medio de transporte para desplazarse por la ciudad y no por ocio.

Por eso, la intención es que en cada parada se habiliten varios puestos para este tipo de vehículos, cuya batería se recargará a través de sus propios candados. Las bicis eléctricas pueden alcanzar una velocidad de hasta 25 kilómetros por hora y la batería tiene autonomía para unos 60 kilómetros. El nuevo software ya se adjudicó a una empresa por 12.500 euros.

De momento, lo que se va a hacer es adquirir una treintena de bicicletas convencionales más para renovar las que han ido quedando inservibles. En estos momentos, hay en total unas 150, un centenar de ellas en la calle y el resto para sustituir a los vehículos que se envían al taller para que se reparen.

Badajoz es la única ciudad extremeña en la que el sistema público de alquiler de bicicletas ha tenido éxito y se mantiene. Con fondos de la Edusi, se habilitarán dos nuevas paradas en El Progreso, junto al instituto San José, y el Casco Antiguo.