Estamos con el autismo . Esa era la frase que ayer se podía leer en los trescientos globos blancos que sujetaban los participantes en la marcha convocada por la Asociación de Padres de Niños Autistas de Badajoz (Apnaba) con motivo del Día Mundial del Autismo, para reivindicar igualdad de oportunidades dentro de la sociedad para que ningún colectivo se mantenga "a la sombra".

Más de medio millar de personas, según la organización, se sumaron a este paseo festivo-reivindicativo desde San Francisco hasta el Ayuntamiento de Badajoz, donde una representación fue recibida por el alcalde, MIguel Celdrán, en el salón de plenos. Entonces, María Daza, una de las usuarias de Apnaba, fue la encargada de dar voz a las personas que sufren este tipo de trastorno y reclamar a las administraciones que garanticen sus derechos en vez de escudarse en políticas "caritativas y asistenciales", así como que se impliquen en la investigación de esta enfermedad, de la que aún hoy se desconoce su origen.

"Salir a la calle es la mejor forma de concienciar, sensibilizar y desmitificar todo lo relativo a los trastornos del espectro autista", apuntó el director del centro educativo de Apnaba, Francisco Estévez, quien señaló que "aunque se ha avanzado, todavía queda mucho. Y sobre todo, lo que pedimos a nivel social es que no sea solo el discapacitado el que se tenga que adaptar continuamente a la sociedad, sino que ésta también debe hacer un esfuerzo por entrar en este mundo tan interesante y peculiar", dijo.

Tanto Estévez como la gerente de Apnaba, Pilar Dávila, recordaron que la prevalencia de los trastornos del espectro autista se ha incrementado en los últimos años de uno por cada mil habitantes a uno por cada 150. Por ello, reclamaron más recursos para su diagnóstico y su atención.

De hecho, en Apnaba --con unos 150 alumnos y usuarios-- están pendientes de ampliar sus instalaciones (la crisis ha retrasado el proyecto) para poder cubrir la demanda.