Promovido por la Confederación Empresarial de Turismo de Extremadura (Cetex), una treintena de locales de ocio nocturno de Badajoz firmará un código ético, un compromiso de buenas prácticas cuyo borrador está bastante avanzado aunque aún se encuentra abierto a modificaciones, con el que se comprometen a adoptar medidas para intentar conciliar los intereses de los empresarios y los residentes en la zona donde se ubican estos establecimientos. Según ha explicado el gerente de Cetex, Antonio Martínez, tienen previsto reunirse la próxima semana para rematar el contenido y firmarlo, así como mantendrán encuentros con asociaciones de vecinos del Casco Antiguo para concretar lo que ya están negociando a través de contactos iniciales.

Los negocios que finalmente firmen este código ético expondrá en sus establecimientos un cartel o logotipo visible para que sus clientes y la autoridad conozca su compromiso. «Lo que queremos es diferenciarlos de los que no cumplan el código ético y los vecinos ya sabrán que ese local no les va a dar problemas».

El código abarca un amplio espectro de compromisos, que se refieren a comportamientos para evitar el exceso de ruidos y también para contribuir a la limpieza de la vía pública. En primer lugar, según recoge el borrador, los firmantes se comprometen a cumplir la ley vigente, con especial atención a las limitaciones acústicas y el horario de cierre. En segundo lugar, ofrecerán colaboración con los servicios de limpieza de apoyo para el aseo de portales y locales anexos a los negocios de ocio nocturno. También aceptarían «en la medida de lo posible», el almacenamiento de las basuras en el interior de los locales de forma que se sacarán a los contenedores en el horario que menos perturbe el descanso del vecindario, «haciéndolo de modo rápido y lo más silencioso posible», pero «bajo ningún concepto» se depositarán residuos en la vía pública. Para que este comportamiento resulte eficiente, los empresarios piden la implicación del ayuntamiento para que flexibilice y adecúe los sistemas y horarios de limpieza y recogida de basura, de forma que se tenga en cuenta el descanso de los residentes, no solo que se cumpla el servicio.

Por otro lado, los firmantes realizarán «un esfuerzo» para concienciar a los clientes del problema que genera el ruido en la vía urbana y, a tal efecto, atendenderían al derecho de admisión en los casos más graves e incluso acudirían a la policía para proteger el orden público.

Otro punto fundamental si se cumple es el quinto, con el que los hosteleros se comprometerían a no facilitar la consumición de bebidas fuera del establecimiento y quedaría prohibido el trasvase a recipientes de plástico. Asimismo, el código se refiere a los veladores, cuyo número autorizado hay que respetar, procurando que su instalación no suponga una barrera para los transeúntes con problemas de movilidad. También alude el listado a la formación de los empleados en materia de protección ambiental y en la recogida de los veladores y de la basura de forma silenciosa. Además, quienes firmen este código se comprometen a ser «nuestros propios observadores» para su cumplimiento, contando con el apoyo de Cetex.