Tres empresas han trasladado al ayuntamiento de manera informal su interés por la gestión de los multicines Puente Real, que permanecen cerrados desde medidados de noviembre, cuando la empresa concesionaria, Zojadab, decidió dejar el negocio por falta de rentabilidad. Sin embargo, sí siguen funcionando dos de los locales del mismo centro, que tienen entrada desde el exterior. Una de las empresas que ha mostrado interés es Cine Sur, del centro Conquistadores, donde están las únicas salas de cine que ahora funcionan en Badajoz y que ya ha manifestado en este diario su intención de ampliar el negocio debido a la creciente demanda tras el cierre de los multicines Puente Real.

Según ha informado el concejal de Patrimonio, Jesús Villalba, a este diario, Zojadab ya ha pedido por escrito al consistorio la reversión de la concesión, que había firmado por 40 años. Ahora el ayuntamiento tiene que estudiar qué implica la devolución y si conlleva alguna compensación.

Villalba se escuda en que está todo en manos de los técnicos municipales para justificar que todavía no saben qué ocurrirá con este centro comercial, pero que una vez que se resuelva la devolución la concesión tendría que salir a información pública. El concejal sí confirmó que no se puede cambiar el uso de esta concesión administrativa. En Badajoz existe el precedente de la Escuela de Hostelería de la plaza Alta, que también abandonaron los concesionarios.

PREOCUPACION Mientras esta situación se solventa, el responsable de uno de los dos negocios que perviven en el centro Puente Real, Marcos Gómez, dueño de La Pulpería de María, muestra su preocupación por que no se agilice una solución para estas instalaciones, pues asegura que ya el deterioro es evidente y se irá incrementando a medida que pasen los meses y no haya nadie que explote el centro de ocio. De momento siguen abiertos esta marisquería y una pizzería, que se han tenido que hacer cargo del servicio de limpieza de los lavabos, que eran comunes para todo el centro, y de contratar una "mínima" vigilancia, que antes asumían entre todos los locales.

Marcos Gómez cuenta que al principio, cuando se cerraron los cines, estos dos negocios se resintieron, porque mucha gente creía que todo el centro había dejado de funcionar. Las primeras semanas, hasta que transcurrió al menos un mes, se notó que bajó mucho la clientela pero ahora asegura que están volviendo a la normalidad porque ya sus clientes han comprobado que siguen funcionando.

CRISTALES ROTOS Estos dos negocios urgen que vuelva la actividad al centro Puente Real, aunque no sea con unos cines, o con menos salas, pero que se reabran las instalaciones y que todos los locales se ocupen. El dueño de la marisquería asegura además que como se dejen vacíos mucho tiempo acabarán por deteriorarse por completo porque afirma que el abandono "se nota día a día". Cuenta que ya han roto incluso cristales y otros daños en las instalaciones, "y si esto sigue así, en pocos meses esto se caerá a cachos y luego no habrá forma de recuperarlo".

Gómez confirma que es cierto que se ha acercado mucha gente interesándose por el cierre de las instalaciones y cree conveniente que el ayuntamiento dé a conocer cuándo se va a sacar de nuevo la concesión para que los empresarios interesados hagan sus planes, pues aduce que el centro tiene muchas posibilidades de salir adelante "si viene alguien con un poco de iniciativa y solvencia".