La Universidad Popular de Badajoz, institución que existe en la ciudad desde hace 20 años, ha iniciado una etapa de cambios y reestructuración para adaptarse a los nuevos tiempos y llegar a todos los colectivos, según informó ayer el concejal del área, Jesús Villalba, en la presentación de las actividades del primer semestre. Villalba compareció acompañado de la nueva directora de la UPB, Julia Guerrero. A lo largo de estos seis meses, más de 5.000 personas se beneficiarán de las actividades.

La directora recordó que aunque los índices de analfabetismo han descendido mucho, sin embargo en la zona rural hay una parte de la población de más edad que demanda la obtención del graduado, pero no se puede desplazar a Badajoz, de ahí la decisión de llevar estos cursos a los poblados. Esta actividad también está dirigida a los jóvenes de más de 18 años que se salen del sistema educativo reglado sin concluir sus estudios.

NUEVAS TECNOLOGIAS La nueva directora hizo hincapié además en el interés por las nuevas tecnologías, pues la universidad popular no quiere quedarse atrás en la Sociedad de la Información. Por eso se ha programado un aula de nuevas tecnologías con formación básica. Una de las actividades más demandada es la enseñanza de portugués. Existen 15 cursos, con 400 alumnos.

Otra de las áreas que abarca la universidad popular es la de intervención social, dirigida a inmigrantes, colectivo que realiza 2.600 consultas, cursos de castellano y acciones de integración en colaboración con el Instituto de Servicios Sociales.