Un taller de chapa y pintura del polígono de San Roque, en Badajoz, ha adoptado un sistema robotizado para el arreglo y pintado de carrocerías pionero en la península. La empresa Atiliano y Antonio presentó, en su 25 aniversario, este proyecto tecnológico que ayer inauguraron Guillermo Fernández Vara, presidente extremeño, y el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán.

El sistema italiano Drytonic permite una notable reducción de los tiempos de espera en taller, en cada parte del proceso, mediante un secado directo de las moléculas de pintura a 130 grados con un acabado similar al de fábrica, que Celdrán denominó "microondas para coches".

El sistema reduce un 80% el consumo energético, la emisión de gases a la atmósfera y cuesta 120.000 euros, además de la formación de 22 profesionales.

Vara destacó el valor de unir tecnología y profesionales en la pequeña y mediana empresa, para invertir los valores e ir de lo local a global, y no a la inversa. "No desconfío de lo grande, es que doy mucho valor a lo pequeño, a la pyme", dijo, y resaltó que "el futuro depende de los Atilianos y Antonios", quienes le transmitieron su pasión por las innovaciones que querían realizar en su taller pacense, precisamente en tiempos tan duros como éstos de crisis.