Los vecinos de la barriada de Pardaleras reclaman al Ayuntamiento de Badajoz el arreglo de una tubería por la que brotan aguas fecales y otros deshechos, que causan en el vecindario un "problema de salud de primer orden", según detalla a la agencia Europa Press el presidente de la asociación de vecinos, José Luis López, quien aclara que este problema se inició en mayo de 2009.

López indica que todo comenzó "con el reventón de la tubería" motivado, en su opinión, por camiones y otros vehículos de gran tonelaje empleados para las obras en un solar colindante a la conducción del agua.

Los vecinos remitieron varios escritos con fotografías al ayuntamiento el año pasado solicitando soluciones, pero desde el consistorio se comunicó que el arreglo "no les corresponde" a los servicios municipales ni a Aqualia, sino a los propios vecinos. Sin embargo, el presidente de la barriada pacense no está de acuerdo y matiza que "con el calor, el olor va a ser insoportable". "Lo que sale es caca".

Para el secretario de esta asociación, Juan José Martínez, se trata de "un problema sanitario de primer orden", como así lo ha constatado el informe elaborado por "un inspector de sanidad", tras las reiteradas denuncias vecinales.

Ante los inconvenientes que les acarrea esta situación pide que realicen las obras oportunas para subsanar este problema "y luego que pague la factura quien lo tenga que pagar", aunque temen que de no repararse a tiempo la situación se agrave y se acaben mezclando "las aguas fecales" con la potable.

En la misma línea, otro de los afectados, Luis Rodríguez, lamenta que no atiendan sus peticiones, ya que "no se puede estar del olor" que desprenden las emanaciones y además considera que el arreglo no corresponde a los vecinos pues son "los camiones los que han roto el asfalto" y causado otros desperfectos en las inmediaciones de la tubería averiada, mientras los primeros bloques de inquilinos se encuentran a "más de 70 metros de distancia".

Por parte del Ayuntamiento de Badajoz, el responsable del servicio de agua municipal, Juan José Gómez, indica que, según el reglamento en vigor, "la acometida del saneamiento desde el edificio hasta la conexión con el colector municipal, ese tramo, es competencia de la propiedad", y por lo tanto cualquier "anomalía" que afecte a ese tramo la "tienen que pagar los propietarios".