Dos de las zonas residenciales más acomodadas de la ciudad, como son Las Lomas y Los Montitos, vienen padeciendo desde hace años problemas que los vecinos urgen que se resuelvan. El más acuciante es la estrechez y mala iluminación del único camino de acceso a las dos urbanizaciones y otro vinculado es que no tienen autobús urbano, así como carecen de otros servicios municipales que sí disfrutan la mayoría de los barrios.

En Las Lomas viven en torno a 300 personas. Esta urbanización privada se creó en 1996, hay 72 viviendas unifamiliares y una segunda fase prevista. El presidente de la comunidad de vecinos, José Caballero, ha explicado a este diario que hasta el 2006 no se ha resuelto el expediente de cesión obligatoria del 10% del terreno al ayuntamiento, pero ha pasado un año desde que "esta urbanización está perfectamente legalizada" y sin embargo "los servicios municipales siguen sin llegar". Los Montitos es muy anterior, pues tiene 40 años y allí hay más de cien chalets independientes, pero el ayuntamiento no ha recepcionado todavía la urbanización porque las infraestructuras estaban en muy malas condiciones y hasta que los propietarios no las han puesto a punto no pasarán a ser municipales, según la información del presidente de esta comunidad, José Valverde.

En la actualidad existe una línea de autobús urbano que llega hasta la altura de Portero Escobar, que dista casi 1 kilómetro a Las Lomas y 200 metros más hasta Los Montitos. En caso de ampliar la línea, no podría entrar a la urbanización de Las Lomas, al ser privada, pero sí hasta la entrada, donde según los vecinos hay espacio suficiente para una parada. Según fuentes consultadas por este diario en la empresa del transporte urbano, Tubasa, el problema es la estrechez de la carretera, pero cabría la posibilidad de utilizar un microbús, decisión debe tomar el nuevo concejal del servicio.

SIN LUZ A la estrechez del camino se suma la ausencia de iluminación y la inexistencia de aceras. Muchas personas que carecen de vehículo propio (fundamentalmente empleadas de hogar) tienen que dirigirse andando hasta la parada y se exponen a un verdadero peligro desde que empieza a oscurecer. Caballero no recuerda que haya ocurrido nunca nada, pero apunta que es debido a que los conductores son conscientes del riesgo y circulan con cuidado. "Yo por ejemplo --cuenta Caballero--, que tengo dos hijos adolescentes, no permito que suban o bajen andando hasta la parada, y los tengo que llevar yo". Todas estas familias se han ido organizando para llevar y traer a unos y otros en sus vehículos particulares y hasta ahora no se habían quejado, "pero es de una injusticia tremenda y lo queremos reclamar", insiste.

Un problema añadido es que no se sabe de quién es esta carretera, "que según yo tengo entendido no es de nadie", dice Caballero. Antiguamente era un camino de herradura (para carros) que iba hasta La Albuera. Cuando se ha asfaltado por última vez el gasto se ha compartido entre la Sociedad Hípica, Los Montitos, Las Lomas, la diputación y el ayuntamiento. "Pero nosotros entendemos que si el ayuntamiento en su día dio licencia para estas viviendas, era consciente del problema de acceso y lo tiene que solventar", señala el presidente de Las Lomas. José Valverde apunta que como hay previstas varias urbanizaciones alrededor, confía en que se resuelva.

En cuanto a las aguas residuales, Las Lomas tiene su propia red, que es privada y que enlaza con el colector general a la altura de la gasolinera de la carretera de Sevilla. Esta red privada tiene una servidumbre de Los Montitos, cuyas aguas fecales bajan hasta Las Lomas y de ahí al colector general. Los vecinos pretenden que el ayuntamiento se haga cargo de toda la red.

José Valverde añade que hasta hace poco no tenían ADSL para Internet, pero han conseguido que Telefónica instale una centralita en Las Lomas para las dos urbanizaciones.

Los representantes de los vecinos de ambas urbanizaciones están esperando a que se ponga al día la nueva corporación para entrevistarse con los responsables del ayuntamiento.