Los vecinos de la barriada de Pardaleras quieren proponer al Ayuntamiento de Badajoz una solución para agilizar la construcción del colegio Nuestra Señora de Bótoa --estancada por una servidumbre--, que consistiría en comenzar a edificar el centro educativo en los metros cuadrados necesarios del solar, reservando el resto para una vía a la que diesen las casas de la calle Luisa de Carvajal, que han abierto puertas traseras ilegales. "Después, el ayuntamiento ya se encargaría de resolver el problema de las puertas ilegales con los vecinos", explica Juan José Martín, secretario de la Asociación de Vecinos de Pardaleras

La cesión del solar en el que se va a construir el nuevo colegio está pendiente de que el consistorio resuelva la servidumbre que tiene el suelo por las citadas puertas ilegales. Esta situación hace que el proyecto no avance y es algo que los vecinos quieren que se solucione cuanto antes, también por la suciedad que se acumula en el solar.

EL SOLAR La Asociación de Vecinos de Pardaleras además de presentar su propuesta al ayuntamiento para una pronta solución de la construcción del centro, quiere pedir al consistorio que retire los restos de la limpieza que cada año se lleva a cabo en el solar donde irá el colegio.

Martín explica que los restos "son pastos, hierbas secas y material orgánico", que se acumuló en un lateral del suelo y aún no han sido retirados. Los vecinos piden que se eliminen del lugar estos restos porque en ellos se "crían muchos bichos" y puede provocarse un fuego con cualquier pequeña chispa.