Restos de podas y madera de árboles talados, basura, vallas tumbadas, montones de hojas secas, malas hierbas y ramas que rozan las ventanas y cornisas. Este es el paisaje que ven a diario los vecinos de Las Moreras que viven junto al antiguo parque del Vivero, que linda con la avenida de Elvas.

«Desde que entregaron los pisos, hace más de 20 años, aquí no se ha hecho nada», lamenta un vecino sentado en la acera. No hay bancos ni juegos para los niños. Pero lo peor, según relatan otras dos vecinas, es que se producen incendios todos los veranos y de la zona salen ratas y otros bichos.

Hace una semana una rama de un árbol cayó sobre un coche y también golpeó a un niño que jugaba cerca. «Gracias a Dios no le pasó nada, pero pudo ser muy grave», denuncia otra residente.

Los vecinos piden, como ya hizo la Asociación Salvar el Parque Ascensión, que este espacio se ponga en valor y se haga un parque para que los residentes puedan disfrutar de una zona verde junto a sus casas. «Estamos abandonados», repiten todos.