Las máquinas han entrado en la plaza Juan Ramón Jiménez, en el Cerro de Reyes, y han retirado gran parte de la basura que se acumulaba en el entorno, especialmente junto a los nuevos contenedores, donde se había creado un vertedero improvisado en el que muchos aprovechaban para tirar escombros, muebles y desechos.

Los vecinos llevan años reclamando que se acondicione la zona y aunque han visto como tras sus quejas --colgaron pancartas y denunciaron su situación ante Sanidad, que alertó del riesgo para la salud de los residentes-- se ha reducido la suciedad, reclaman que la plaza se asfalte para acabar de una vez por todas con sus problemas. Las familias que residen en esta zona del Cerro de Reyes aseguran que cuando llueve la plaza se convierte en un "barrizal", que les obliga hasta usar "botas de agua" para poder entrar y salir de sus casas. "Ya se han caído varios vecinos", lamentan.

Como la zona no está urbanizada ni cuenta con red de alcantarillado, se forman grandes balsas de agua y los vehículos tienen verdaderas dificultades para circular. "En vez de una plaza tenemos una piscina comunitaria", se quejan los afectados, que no quieren esperar otras 30 años para ver su plaza asfaltada.