Los vecinos de Valdebótoa han solicitado que se arreglen los accesos al cementerio de la pedanía, que quedan "impracticables" cuando llega la época de lluvias. Según explicó el presidente de la asociación de vecinal, Joaquín María Ramos, esto obliga a ir al camposanto por la carretera, con el consiguiente "peligro" para los peatones. Además, se producen largas colas de vehículos cuando los coches fúnebres y los familiares de los fallecidos utilizan esta vía para llegar al recinto.

Ramos explicó que el actual camino es un cordel, por lo que entienden que no se pueda asfaltar, aunque reclamó que, al menos, se acondicione con zahorra u otro tipo de material "para que al agua se filtre" y no se formen grandes charcos. Los vecinos plantean que si esta posibilidad tampoco es viable, se construya un nuevo camino asfaltado paralelo a la carretera. "Aunque creemos que preparar el cordel sería más económico", apuntó el presidente vecinal.

Otra de las viejas reivindicaciones que los vecinos no olvidan, aunque hasta la fecha no han logrado ningún avance, es que el servicio de autobús urbano funcione en la pedanía durante los fines de semanas y festivos. Valdebótoa comparte esta demanda con el resto de pedanías de la ciudad.