Una vela encendida a santa Bárbara para pedir que alejara las tormentas fue la causa de un incendio que se originó pasadas las dos de la madrugada de ayer en el piso segundo derecha del portal 4, en los grupos de La Soledad, de Badajoz, que calcinó el 50% de sus dependencias y obligó al desalojo del edificio.

Cuando los bomberos acudieron a la avenida de José María Alcaraz y Alenda ya habían abandonado el edificio algunos vecinos y la policía local avisaba a los demás para que salieran a la calle o cerraran las puertas. El fuego se originó en la sala de estar del piso, donde hallaron unas velas junto a estampas de santos, que la mujer se había dejado encendidas sobre una mesa.

Tres personas tuvieron que ser atendidas por los servicios médicos por sufrir lesiones provocadas por la inhalación de humo y una más resultó herida de carácter leve por haberse caído por las escaleras mientras desalojaba su vivienda, según la policía local.

BALAS DE OXIGENO Se da la circunstancia de que la mujer, llamada Tomasa, tenía en su casa dos balas de oxígeno, y una de ellas tenía un escape, lo que hizo que el fuego fuese más vivo y "un problema adicional porque favorece la combustión", explicó el jefe de los bomberos, Fernando Bermejo, quien señaló que tardaron una hora en concluir la extinción.

Elena Carrasco, una joven que vive enfrente de la vivienda siniestrada, contó a este diario que "a mí nadie me avisó; salí porque escuché voces y ruido porque no estaba acostada, y me encontré todo el descanso lleno de humo. Un amigo mío que estaba aquí me cerró la puerta y me llevó a una habitación junto a una ventana". Luego la llamaron para que bajaran a la calle, "pasé mucho miedo", explicó.

Esta vecina afirmó que la "señora Tomasa, que tiene unos 70 años, tiene muchos santos y les pone velas y por eso se incendió el salón y toda la casa". Según recordó, fue una mujer que cuida a la vecina quien la sacó de la vivienda. Yo llamé a mi padre, porque soy muy miedosa, y vi que una ambulancia se llevaba a una mujer".